Llegó el verano y para muchos, las vacaciones. Y entre ellos son varios los que pegan el portazo y parten al mar o a las sierras (o a donde sea) para descansar. La casa queda sola, ¿qué hacer y qué no para evitar la visita de ladrones en nuestra ausencia? En contacto con Radiópolis (Radio 2), Jorge Paleari, miembro de la Cámara santafesina de Seguridad Privada, dio algunos consejos.

No dejar luces ni radio encendidas. Algunos piensan que sonidos dentro de la casa o habitaciones iluminadas pueden despistar a los delincuentes y hacerles creer que hay personas dentro. “Pero si no hay nadie que la apague por la mañana es un llamador porque nadie tiene las luces encendidas cuando no las necesitan”, observó.

Evitar dar demasiadas precisiones de nuestros planes en las redes sociales. Aunque las nuevas formas de comunicación pueden ser muy útiles como prevención o para pedir ayuda en casos de riesgo, los datos que publicamos en nueestros perfiles puende ser nuestra perdición. Paleari señaló que hoy en día es muy raro que un robo se cometa –al menos a un domicilio– sin inteligencia previa; entonces nuestros perfiles de Facebook o Twitter pueden ser una gran fuente de información para los ladrones. “Lo mismo con los stickers en las lunetas de los autos”, llamó la atención. Paleari desaconsejó su uso: “A veces la luneta de un auto da el perfil social y económico de una persona; cuántos hijos tengo, cuántas mascotas...”.

Confiar en el vecino. No en todos ni en todo, pero para Paleari, la desconexión con el otro abona el terreno a la inseguridad. “A veces el vecino ven que están cargando cajas a un auto y piensa que es una mudanza y te están robando”, señaló. Esto sucede, explicó, porque se ha perdido la costumbre de relacionarse con el otro. Para él, entonces, la mejor recomendación es (re)construir una buena relación con los vecinos, “que sean los propios vecinos quienes estén atentos a una eventualidad”.

Recomendaciones extra

Cargar las valijas en la garage. Si es que vamos a emprender, claro un viaje en auto. Evitamos así que alguien en la calle tome nota que los habitantes de tal o cual casa no estarán allí por algunos días.

Evitar la acumulación de correspondencia. De esta manera se evita dar señales de que la vivienda se encuentra vacía.

El contestador. Dejar un contestador conectado evita que el teléfono suene durante varios minutos, advirtiendo que no hay nadie para contestar. También es aconsejable bajar el volumen del teléfono para que el sonido no se escuche desde el otro lado de la puerta de entrada.