En el estudio, publicado en "Journal of Nutrition Education and Behavior", los investigadores encontraron que afirmaciones como "comé las lentejas si querés crecer más y correr más rápido", eran más eficaces para conseguir que los niños coman alimentos saludables que presentarles la comida repetidamente sin conversar.

De hecho, los niños comieron el doble de alimentos saludables cuando se les dijo cómo les beneficiaría en términos que pudieran entender, en lugar de cuando se les dio la comida sin esta información, según publica el portal elespectador.

"Cada niño quiere ser más grande, más rápido, capaz de saltar más alto. El uso de este tipo de frases hizo que la comida fuera más atractiva para comer", ha afirmado la profesora asociada en el Departamento de Desarrollo Humano de la Universidad de Washington y autora principal del estudio, Jane Lanigan.

En el estudio Laningan y sus colegas quisieron ver si las frases de nutrición centradas en el niño (CCNP, por sus siglas en inglés), declaraciones afirmativas que simplemente transmiten los beneficios de los alimentos saludables, influyen en los niños pequeños para que elijan alimentos más saludables. Estas frases se centran en los objetivos que tienen los niños y se basan en información nutricional precisa.

Fuente: elespectador.com