Cuando ocurrió le sacó provecho. Ayer pasó tres o cuatro veces, mientras que en partidos con mejores actuaciones ocurre más de diez, como mínimo. Central hace muy bien algo que Cruyff pidió muchas veces como entrenador y que solicitaba en sus últimas columnas de opinión en un diario holandés.

Seguramente Coudet no las leyó porque no debe saber holandés. Pero su equipo cuando se sitúa en campo rival encuentra un pase. El pase. Un pase vertical, justo cuando abundan los pases horizontales, hacia un jugador que recibiendo de espalda pone de frente a otro o puede continuar con una jugada de ataque. Cruyff lo incluía cuando hablaba de "tercer hombre". Central se cansó de hacerlo con Larrondo a lo largo del torneo. Y ayer lo hizo en pocas situaciones, que vamos a contar luego de que observen el siguiente video.

Miren bien acá: en el 0.44 segundos del video. Donatti, como líbero, encuentra a Herrera tras pase vertical. Jugada previa del penal de Central con el cuál hizo el tercero, el que iba a sellar la victoria que luego fue empate brasileño.

Si miraron bien lo que pasa a partir del segundo 40, vuelvan a ver lo que ocurre en los segundos iniciales. Central lleva la pelota de lado a lado, circula rápido en campo rival. Pase, pase, pase. Ataque, ataque, ataque.

Si lo pasarían por ESPN desde Europa, tendría más repercusión. Pero no. Pasa en Rosario y algunos hasta que no lo diga Román Iucht no se animan a gritarlo. Pasó con el Newell´s de Martino en 2013 mucho antes que fuera campeón, jugaban como los dioses pero como en Buenos Aires tardan en reconocerlo, algunos desde acá también. Ni hablar desde Europa, donde suelen minizar la "cultura tactica" de nuestros equipos. 

En este tiempo, el fútbol argentino tiene muy buenos equipos. Que busquen en Alemania o en España un equipo que juegue bien como Central o Lanús y que esté fuera de los cinco con más presupuesto de la liga. Difícil. Y acá ocurre y en más casos.

Coudet logró algo que vale reconocer tras un partido como el de anoche, donde empató cuando tenía que haber ganado, donde hubo fallos y donde no jugó bien. Llegó mucho al arco pero ayer no jugó bien.

Si el tiempo está después, ayer Central no lo entendió. Se apresuró demasiado, seguro que por ir debajo del marcador un muchos minutos del encuentro, pero para encontrar su jugada maestra, llave ofensiva que desordena cualquier estructura rival, tiene que pasar lo que pasó en el video que exhibimos. Para eso tiene que haber diferentes líneas de pase en campo rival. Para eso los jugadores deben posicionarse y moverse en relación al pase que va a venir. Todos deben interpretar que el pase de Donatti y la recepción de Herrera será útil si a su vez hay dos hombres abiertos, tres posibles receptores en una línea más baja y un punta como Marco Ruben molestando a los centrales rivales.

Ya es hora que el fútbol argentino vuelva a tener una escuela original, propia, y porqué no que todos los entrenadores que comparten algunas ideas y que vemos en diversos equipos en el torneo, puedan formar una escuela determinada de entrenadores. Valorar a este Central es parte de eso. Lo que pedía Cruyff no es algo que no se realizó en décadas anteriores en nuestro fútbol (repasar artículo anterior de esta columna). Coudet y Garcé parecen entenderlo, aunque no sepan leer en holandés, y sus jugadores nos otorgan un equipo que nos hace disfrutar y sentir las raíces de nuestro fútbol. 

Por si fuera poco, observen a Lo Celso en el inicio de la jugada preparada en el gol de Cervi: