Apagar las luces de los edificios públicos y desalentar los espectáculos nocturnos. Entre otras cosas, estas son las propuestas de la Unión Industrial Argentina para resolver la crisis energética. El presidente de la entidad, Juan Carlos Lascurain, se reunirá este jueves con la ministra de Economía Felisa Miceli para debatir el tema.
"Ante la contingencia, lo que tenemos que resolver es cómo salimos adelante", sostuvo Lascurain, en declaraciones a una radio porteña. El dirigente enfatizó que para ahorrar energía "la vía pública podría estar iluminada en menor medida, y los espectáculos deportivos deberían ser durante el día". También habló de "apagar las luces en los edificios públicos".
Carlos De León, gerente de operaciones de la EPE, negó que por el momento se evalúen cortes de 12 o 24 horas en las industrias. Confirmó que las directivas de la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) respecto de jueves y viernes plantean cortes de 18 a 23, tal como sucedió martes y miércoles. Y adelantó que no hay planes para la semana próxima, ya que la decisión de realizar nuevos cortes dependerá de una serie de variables, entre ellas el clima.
Por su parte, Guillermo Moretti, integrante de Fisfe y presidente de la UIA en la zona, comentó que "muchas empresas tratan de adecuar los turnos para no tener problemas de suspensiones", pero no descartó que pueda haberlas en sectores críticos como el automotriz, que trabaja las 24 horas, en donde "están viendo qué pueden hacer", señaló.
Medidores para los grandes usuarios
La orden de Cammesa de reducir la demanda de los grandes usuarios a 1.200 MW fue criticada por el sector industrial. Entre otras cosas, plantearon que la medida no tuvo en cuenta el nivel de consumo de cada gran usuario en particular.
En este marco, Cammesa decidió instalar a los denominados “grandes usuarios” eléctricos un medidor y un dispositivo llamado RIC (Registro e Interfase de Comunicación) que emitirá un mensaje cada 15 minutos en el que consignará el promedio del consumo eléctrico en ese lapso.
El control comenzará sobre 9.000 grandes usuarios de energía eléctrica distribuídos en el territorio nacional. Cammesa clasifica como gran usuario a aquel que tiene una demanda de potencia mayor a 300 megawatts (MW).
Esta semana Cammesa prevé firmar los contratos con 10 empresas que ganaron la licitación (entre ellas están Telefónica y Telecom), cinco para los medidores y cinco para los RIC, las que contarán con 45 días para instalarlos.
La implementación del nuevo sistema de control que permitirá a Cammesa vigilar “on line” a cada uno de los grandes usuarios y ordenarles correcciones en su consumo eléctrico sin provocar perjuicios en el resto, registra un atraso de varios meses de acuerdo con lo que se había dispuesto oportunamente.