Los datos surgen de un trabajo realizado el año pasado en 949 escuelas por el Programa de Sanidad Escolar (Prosane), en el que se relevó a más de 45.000 chicos de seis a 12 años de escuelas públicas, especiales y privadas.

"Sobre ese total analizamos 17.848 y observamos que el exceso de peso se mantiene como un problema de salud prevalente, una epidemia mundial derivada de la mala dieta y de la falta de actividad física", explicó Luis Crovetto, director provincial de Atención Primaria y responsable del Prosane.

Según el relevamiento, un 24,2 por ciento de los chicos presentó exceso de peso, mientras que en el 18,4 por ciento de los casos se halló algún nivel de obesidad, según las curvas de medición del crecimiento avaladas por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Además, tres de cada diez niños tiene caries y dos de cada diez presenta problemas de oclusión, es decir, no muerde como corresponde: sobre un universo total de 45.638 alumnos de escuelas primarias, un 30 por ciento presentaba caries y un 18 por ciento maloclusiones.

Desde el Ministerio de Salud de la Nación coincidieron y advirtieron también que tener una vida sedentaria puede generar obesidad, diabetes, ciertos tipos de cáncer y enfermedades cardiovasculares, entre otras, por lo que recomendaron practicar actividad física "no sólo para prevenir esas afecciones, sino para controlarlas cuando las mismas ya se encuentran instaladas".

"Se recomienda que niños y jóvenes de cinco a 17 años inviertan como mínimo 60 minutos diarios en actividades físicas de intensidad moderada a vigorosa. La actividad física por un tiempo superior a 60 minutos diarios reportará un beneficio aún mayor para la salud", precisaron. Y agregaron: "La actividad física diaria debería ser en su mayor parte aeróbica y convendría incorporar, como mínimo tres veces por semana, actividades vigorosas que refuercen músculos y huesos.


Fuente: Télam