Los vecinos de Avellaneda al 2700, en la zona sur de la ciudad, se llevaron flor de susto este sábado cuando el último vagón de un tren desacarriló y se llevó puestos un tapial y un poste telefónico. Afortunadamente no hubo heridos, pero muchas personas se quedaron sin teléfono.

El hecho ocurrió este sábado en Avellaneda y Gálvez. Testigos aseguraron al móvil de El Tres que la formación ferroviaria se desplazaba a “elevada velocidad” y que por eso el último coche se salió de las vías y fue a dar contra un pequeño paredón y finalmente derribó una columna del tendido telefónico.

“Al venir con poca carga y a gran velocidad, el último vagón descarriló”, advirtieron los habitantes del barrio, quienes además destacaron que las consecuencias pudieron ser “mucho peores”.

Ahora los vecinos del lugar están reclamando que se les restituya el servicio telefónico, que fue averiado por el choque contra la columna.