De ahora en más cuatro líneas ferroviarias privadas regresarán a la órbita del Estado a través de la Sociedad Operadora Ferroviaria (Sofse), creada en 2008. Se trata de las líneas Mitre, San Martin, Belgrano Sur y Roca que funcionan en el área metropolitana de Buenos Aires. Es el primer paso en la reestatización de los ferrocarriles que anunció la presidenta Cristina Fernández en su último discurso ante la asamblea legislativa.

Según publicó Página 12, el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, firmó la resolución 171/2015 a partir de la cual fueron rescindidos los acuerdos de operación con las empresas del Grupo Roggio y Emepa que tenían la concesión de estas cuatro líneas. Así, se suman al recuperado Sarmiento.

Con todo Roggio y Emepa se quedarán con el Urquiza y el Belgrano Norte “siempre y cuando no incumplan sus contratos con el Estado”. En otras palabras, su administración quedará bajo la lupa.

“Con la gestión que hicimos demostramos que el Estado puede ser más eficiente que los privados. Compramos coches nuevos, aumentamos la cantidad de pasajeros transportados en un 246 por ciento. En base a esa experiencia es que tomamos la decisión de crear Ferrocarriles Argentinos. Vamos a seguir el mismo sistema que utilizamos con el Sarmiento. Tenemos que ratificar que el Estado puede y sabe cómo administrar bien”, observó Randazzo y concluyó: “La gestión de los trenes debe tener un sentido social más que económico, lo que no quiere decir que no se pueda administrar bien”.