En medio de la ofensiva del gobierno nacional en su contra, el juez de la Corte Suprema Carlos Fayt ratificó su decisión de seguir en el cargo pese a sus 97 años y dijo que seguirá defendiendo los “valores democráticos y constitucionales” desde su lugar en el máximo tribunal.

Fayt fijó postura mediante un comunicado que leyó el abogado Ricardo Monner Sanz en la puerta del domicilio del juez, al frente de una nutrida convocatoria en su apoyo.

“La considero una manifestación de solidaridad con los valores democráticos y constitucionales que siempre he defendido y que seguiré haciéndolo desde mi lugar de juez de la Corte". "¡Les doy un sincero, afectuoso y fraternal abrazo!”, dice el texto.