Los bloques de diputados del massismo, el kirchnerismo y el justicialismo anunciaron este martes un acuerdo para impulsar una sola propuesta de reforma al impuesto a las ganancias, mientras el oficialista Cambiemos seguía buscando los votos para imponer su dictamen que establece un aumento moderado del mínimo no imponible y actualización de escalas.

En una conferencia de prensa conjunta brindada en la Cámara baja, legisladores repasaron lineamientos y coincidieron en destacar el “gran esfuerzo” realizado por cada una de las partes para arribar al consenso que beneficie “a los trabajadores”.

Oscar Romero (PJ), primero en tomar la palabra, señaló que en el convenio logrado "prevaleció el interés por defender a los trabajadores” y dijo que “cada uno ha puesto su esfuerzo para que esto se logre".

Consideró que el de Ganancias "es un impuesto injusto, desactualizado que casi no tiene razón de ser” y agregó: “Pensamos en los trabajadores, también en las provincias”.

“Los mínimos no imponibles serían de 33.500 pesos para solteros y de 44.000 pesos para casados”, precisó el diputado del Frente para la Victoria Axel Kicillof, ex ministro de Economía de la Nación.

Agregó que se contempla incorporar al alcance del impuesto “a grupos hoy exentos como los nuevos magistrados, que van a pagar; no así los empleados del Poder Judicial”.

Por su parte, el también kirchnerista Héctor Recalde dijo que de avanzar con este proyecto "va a bajar sustancialmente la cantidad de personas que tributan este impuesto".

“La filosofía de que paguen menos pero que paguen todos nosotros no la compartimos. Este acuerdo busca impedir que miles de trabajadores desde el año próximo no paguen impuesto a las Ganancias. No hay ninguna razón para que alguien que cobre 20 mil pesos deba pagarlo”, señaló a su turno la santafesina Alicia Ciciliani, del socialismo.

La negociación

El Frente Renovador, que conduce Sergio Massa, mantuvo a lo largo de toda la jornada negociaciones con el resto de los sectores en los que está dividido el peronismo donde pudieron conciliar las modificaciones a ganancias.

Estas negociaciones entre el massista Marco Lavagna, los justicialistas Diego Bossio, y Oscar Romero, y el ex ministro Axel Kicillof, pudieron concluir en un acuerdo donde se unificaron todas las propuestas, y que según el Frente Renovador es avalado desde el peronismo en el Senado.

De hecho, Lavagna y Bossio se reunieron con el presidente del bloque del FPV, Miguel Ángel Pichetto, aunque sobre el resultado de este encuentro había discrepancias sobre si existió o no un consenso con el senador peronista.

Para Lavagna hubo acuerdo con Pichetto para avanzar en estas reformas, pero allegados al senador dicen que se limitó a escuchar pero "no dio ningún aval ni carta blanca y que sólo dijo que lo analizaron cuando el proyecto se vote en diputados".

En tanto, el oficialismo estaba confiado en poder sumar el respaldo de diputados que responden a los gobernadores para poder imponer su dictamen ya que hasta ahora tenía el respaldo de unos 105 legisladores, que no le garantizaba poder triunfar en la votación.

Su postura era mantener el aumento del 15 por ciento del mínimo no imponible y hacer hincapié que su proyecto cuida los recursos de la Nación y las provincias y que el impuesto con su dictamen se reduce en las primeras escalas en un 70 por ciento.