Este viernes, personal judicial allanó el hospital penitenciario de Ezeiza en busca de la historia clínica del genocida Miguel Etchecolatz para investigar si el personal médico de ese nosocomio falseó datos del estado de salud del represor para que pueda ser beneficiado con la prisión domiciliaria.

Una fuente judicial precisó que el allanamiento fue dispuesto este viernes por el juez federal Ernesto Kreplak ante quien, días atrás, los fiscales generales Marcelo Molina y Hernán Schapiro, y el fiscal ad hoc Juan Martín Nogueira, denunciaron irregularidades en los informes médicos elaborados por el personal del Servicio Penitenciario Federal.

Concretamente, detallaron que hay diferencias en el peso de Etchecolatz. La diferencia se da al comparar un informe del Cuerpo Médico Forense de la Corte Suprema, elaborado en abril, con otro, rubricado en julio, por los médicos del hospital del penal de la cárcel de Ezeiza.

Según la presentación, el segundo informe consigna un peso superior en seis kilos al primero. Y esto resulta la base en la que esos mismos médicos del penal fundamentaron su decisión para señalar que Etchecolatz perdió ocho kilos durante la huelga de hambre que inició para reclamar su prisión domiciliaria.

Explicaron que en abril pasado, el Cuerpo Médico Forense informó que el ex Director de Investigaciones de la Policía Bonaerense pesaba 67 kilos, en el marco de un incidente sobre solicitud de prisión domiciliaria, mientras que los médicos del SPF consignaron, el 25 de julio pasado, que Etchecolatz pesaba 73 kilos.

"Se consignó, a partir de allí, una escala decreciente en su peso, como supuesta consecuencia de la medida, que lo llevó a perder 8 kilos al 12 de agosto, donde se consigna que pesaba 65 kilos", describieron.

Los fiscales indicaron que ante “esta serie de desavenencias sobre el peso de Etchecolatz podríamos encontrarnos ante una posible estafa a la administración de justicia a través de la falsedad ideológica de los informes remitidos a la causa por los funcionarios actuantes".

“La situación cobra especial interés toda vez que (el peso) resulta un aspecto cuasi determinante a los fines de valorar la incidencia de la huelga de hambre en la salud del imputado", indicaron en la presentación.

Etchecolatz fue beneficiado, a fines de julio último, por un fallo del Tribunal Oral Federal 1 de La Plata que le otorgó el arresto domiciliario en dos causas, aunque no se pudo hacer efectivo: otro juez federal de La Plata se lo denegó. Es que lo tiene procesado por crímenes en las brigadas de Banfield, Quilmes y Lanús cometidos en la última dictadura militar.

En tanto, Detenidos de La Plata recusó a uno de los jueces, Alejandro Esmoris, juez subrogante del Tribunal Oral Federal 1 de La Plata, que debía resolver si se le otorga el arresto domiciliario al represor Miguel Etchecolatz en otra de las causas. Finalmente la decisión del beneficio se postergará hasta tanto se resuelva este planteo.