La frase me sorprendió. "Vamos a cero", dijo Damián Schwarzstein. Trabajar con el formato "cero" significa hacerlo con un encabezado especial, para jerarquizar una información excluyente. Se usó cuando murió Néstor Kirchner, cuando Jorge Bergoglio fue elegido Papa o en la definición de elecciones, pero en general en grandes temas nacionales. 

Trabajé un poco más de un año en la Redacción de Rosario3.com, pero estuve la mañana en la que seguramente fue su mayor desafío a nivel periodístico y social: la del martes 6 de agosto de 2013. La explosión en Salta 2141 fue la tragedia más grande de Rosario. Y para Rosario3.com, la cobertura más importante en sus primeros 10 años.

Trabajar en "cero" era eso. Algo extraordinario, poco común. Y me sorprendió que fuera con un tema local. Tengo el registro como si fuera hoy: miré el reloj y eran las 9.40. 

Habían pasado dos minutos de un cimbronazo en pleno centro. "¿Qué es eso de la explosion?", preguntó alguien. Y la Redacción se desesperó: cientos de desconocidos, ciudadanos comunes, escribían en Twitter que habían escuchado una explosión. En zona oeste, donde está Televisión Litoral, no se escuchó nada. "¿Qué fue?". "¿Dónde?". Todos preguntaban, pero nadie sabía con precisión. Hasta que apareció una foto que un usuario cualquiera sacó desde un edificio y mostró una nube de humo en pleno centro de Rosario. 

"Vamos a cero", dijo Damián. No dudó. Ni los Bomberos, ni el Sies ni la Policía tenían exactitudes: sólo que iban para la zona de Salta y Oroño. Aún sin esas precisiones, la cantidad de gente hablando espontáneamente de un mismo tema y una imagen fueron suficientes para una apuesta rápida: algo realmente grave pasó en el centro de Rosario y hay que contarlo. 

Con un formato distinto, una foto y un título referido a una fuerte explosión, Rosario3.com fue el primer medio digital que informó al mundo lo que pasaba. Fuimos monitoreando otros, y hasta los diarios nacionales usaron como fuente la primera foto subida por el portal.

El tráfico fue incesante, como nunca. Y el sistema mostraba visitas de todo el mundo. Como le pasó a todos los grandes medios –no sólo de la ciudad sino también a los nacionales– que empezaron a informar sobre la explosión, la página se "cayó". No se podía acceder.

Vino entonces la decisión de "bajar" toda otra información y hasta los banners de publicidad. Lo importante era otra cosa. Y el sitio reflotó rápido. La historia real fue menos protocolar y más vertiginosa: hubo un llamado irreproducible al área de sistemas. Lo cierto es que en pocos minutos se convirtió en un diario exclusivo sobre una explosión en calle Salta. "2141", dijo Fernando Carrafiello en el aire de Radio 2. Había dejado el móvil en doble fila para llegar rápido. Minutos después, El Tres empezó una emisión especial en vivo.

Hasta ahí, todo era vorágine y también incertidumbre: uno de los redactores vivía enfrente y no atendía el teléfono. Su respuesta fue un alivio. Después, fue imposible no conmovernos: la realidad nos golpeó de frente y nos sacó el microclima periodístico. Los testimonios, las fotos y los videos nos superaron. La orden era sólo una: "responsabilidad" en cada imagen o línea.

En esos días hubo una cobertura especial. Todos sumamos horas en la Redacción y desde la zona de la catástrofe. Fue la intendenta, vino la presidenta. Y sentimos como propia la búsqueda de sobrevivientes. Aún hoy es así. Fue imposible no comprometerse y, con el tiempo, seguir de cerca todo lo referido a Salta 2141. 

Desde 2006 y aquella mañana de 2013 en la que informó al mundo entero hasta hoy, 20 de julio de 2016, Rosario3.com transitó diez años de innovación, calidad periodística y calidez humana. Si hay que brindar, que sea de modo extraordinario: como si fuera en "cero". ¡Salud!.

* Periodista de Radio 2 y El Tres. Trabajó en Rosario3.com entre 2013 y 2014.