La producción siderúrgica registró una caída de 12,4 por ciento en el primer semestre, por la baja performance del sector petrolero, la paralización de la construcción y el retroceso de la industria automotriz, de acuerdo a un informe privado.
El relevamiento, elaborado en base a datos oficiales por IES Consultores, advirtió que la caída del precio del petróleo ocasionó una menor demanda de tubos de acero sin costura para la industria, mientras que el descenso en la construcción generó un retroceso en la producción del hierro hormigón.
Por otra parte, la baja de la industria automotriz y electrodomésticos provoca una menor demanda de laminados, dada la fuerte merma en la producción y en las ventas de los sectores.
Asimismo, en términos interanuales, el consumo aparente de los primeros seis meses del año contra el mismo período 2015 cedió 15 por ciento.
En el primer semestre de 2016 se exportaron 198,1 miles de toneladas, que implica una disminución de 31,1% con respecto a igual período anterior y es el cuarto año de contracción de las ventas externas.
En cuanto a los valores, la caída fue de un fuerte 50,5%, totalizando ventas por 203,6 millones de dólares, al tiempo que 2015 finalizó con exportaciones por 700 millones de dólares (retroceso de 53,2%).
Por su parte, las importaciones de productos siderúrgicos registraron una caída de 21,6 por ciento con relación a igual período de 2015, al alcanzar a las 644 mil toneladas (177 mil toneladas menos).
En cuanto a los valores importados, en el acumulado enero-junio de 2016, las compras al exterior registraron una caída del 29,3 por ciento y alcanzaron 785,2 millones de dólares.
Respecto a los países de destino de las exportaciones, en el primer semestre de 2016 se destaca una diversificación entre Brasil (14,9%), Paraguay (13,2%), Estados Unidos (10,3%), Bolivia (8,5%) y Emiratos Árabes (8,1%) países que concentran el 55 por ciento de las ventas.
"Hacia adelante la principal incógnita está en el futuro del precio del petróleo, en la amenaza del rol de China para el país desde el punto de vista del desarrollo industrial y a la recuperación de Brasil", concluyó el director del estudio, Alejandro Ovando.
