El año pasado murieron en todo el mundo 1,9 millones de personas a causa del sida, casi la mitad de los fallecidos en 2005 por esta enfermedad, según un informe de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Ya representan más de la mitad las personas que viven con VIH y reciben tratamiento, mientras que el número de nuevas infecciones por el virus está en picada. Si embargo el ritmo de caída todavía es demasiado lento como para frenar la epidemia, según consignó Doc Salud.

“Nuestros esfuerzos están dando resultados, pero nuestra lucha por poner fin al sida apenas empieza”, sostuvo Michel Sidibé, director ejecutivo de Onusida, el programa de coordinación de la ONU.

En total, 1,8 millones de personas contrajeron el virus el año pasado, lo que equivale a un nuevo caso cada 17 segundos. Esta cifra registra una caída constante año tras año (salvo en 2014). En 1997 se había alcanzado la cifra récord de 2,5 millones de nuevas infecciones.

Sin embargo todavía se está muy lejos para alcanzar el objetivo de 550.000 nuevos casos que se impuso la ONU para 2020.

Desde el inicio de la epidemia a principios de los años 1980, unos 76,1 millones de personas han contraído el VIH y 35 millones de personas han muerto, el equivalente a la población de un país como Canadá.