Mario Cornaglia, quien explota la concesión de Florida, salió al cruce por Radio 2 de las críticas de los puesteros que se resisten a ser trasladados a la vereda de enfrente. Les recomendó ejercer la gratitud antes que la queja, puesto que las obras que se llevarán a cabo en la avenida redundarán en beneficios para toda la zona; e incluso puso en duda su habilitación.
En diálogo con el periodista Fernando Carrafielo para el móvil de A Diario (Radio 2), Cornaglia aseguró que él ganó la licitación de La Florida de buena de ley y que de hecho, es mucho el dinero que se invierte para mantener la explotación. Además, sostuvo que existen procedimientos legales que deben cumplirse para abrir locales en la zona y en tal sentido cuestionó la validez de los carritos.
“Deberian ser agradecidos y se la agarran con nosotros”, se quejó; de este modo se refirió a la iniciativa municipal –financiada por el concesionario– de renovar el mobiliarlio urbano y construir una bicisenda por la avenida Eduardo Carrasco, entre otras reformas. Para cumplir con las obras se hacía necesario despejar el área, por lo cual se propuso dejar sólo cuatro de los 12 puestos que actualmente venden sandwiches.
Los puesteros se opusieron a la medida apenas la conocieron. Advirtieron que este miércoles por la mañana se dirigirán al Palacio Vasallo para impedir que ocho de los 12 kioscos de comida se relocalicen a la vereda de enfrente. El traslado estaría previsto para marzo pero mañana se definirá a ciencia cierta en la comisión de Planeamiento del Concejo. De no recibir respuestas satisfactorias, amenazaron con cortar la intersección de Buenos Aires y Córdoba.
