A diferencia de otras personas del mundo fútbol, Gerardo Tata Martino cuando habla, dice. En la conferencia de prensa que dio este martes a la tarde después de los incidentes que provocaron la suspensión del clásico el domingo y el posterior cruce de acusaciones sobre la responsabilidad del fracaso, el DT rojinegro lamentó no sólo la pérdida de tiempo en materia deportiva sino haber escuchado “gente que ha dicho cosas lamentables”. Agregó que con este tipo de comportamientos será “muy difícil que podamos sacar adelante” la organización de un Newell´s-Central (o Central-Newell´s).


Si bien Martino dijo que el clásico ya “es un tema terminado”, se permitió analizar algunos hechos. En primer término, señaló, “lamento haber perdido dos o tres días de entrenamiento y un amisoto no jugado, además de volver de la pretemporada para no jugar”. Y enseguida fue al fondo del asunto: “Pero esto que pasó es muy triste, para mí y para todos”.

“Me ha tocado escuchar a gente que ha dicho cosas lamentables”, dijo el Tata y si bien no dio nombres señaló que se refería a “gente vinculada al fútbol y que no”. Pareció dirigido al presidente de Central, Norberto Speciale, y quizás también al ministro de Seguridad, Raúl Lamberto.

Sí rescató el entrenador leproso el rol del secretario de Gobierno municipal, Fernando Asegurado, cuya actitud remarcó como “coherente” y afirmó que “se hizo cargo de decir que el partido no se podía jugar” después de los incidentes. Lo mencionó, en clara contraparte de lo realizado por Lamberto, quien acusó a Newell´s de no presentarse.

Ante ese grado de complejidad y falta de coordinación, el Tata sintentizó: “Así es muy difícil que podamos sacar adelante esta situación”.

“Es una situación muy triste para quienes nacimos en Rosario y jugamos toda la vida acá como me pasó a mí. Es lamentable y vergonzoso, más cuando se da en una época donde todos los clásicos se juegan con total normalidad”, apuntó el entrenador de Newell’s.

“Todos entendíamos que era un partido para jugarlo, por lo que despierta y con el tiempo que hacía que no se jugaba. Sin embargo, también quiero decir que hace seis meses me parecía lógico porque lo veía natural: está claro que me equivoqué, porque llegó un punto donde valía la pena reconocer que había que dar marcha atrás y no jugarlos”, agregó Martino.

A propósito de su anterior opinión sobre el enfrentamiento futbolístico de la ciudad, que ahora parece haber cambiado radicalmente, el técnico rojinegro aprovechó para lanzar una chicana a los actores principales del fracaso: “Yo no tengo problemas en reconocer que me equivoqué, parece que a otras personas eso se les hace muy difícil”, tiró.

Y después le apuntó a la cuestión pseudo folclórica que tan mal le ha hecho al fútbol rosarino en los últimos tiempos y que parece es de nunca acabar: “Habrá quienes quieran ver que Newell’s no fue a jugar un partido. El que lo ve así, se queda en la estupidez y avala que el fútbol no puede mejorar. La realidad es mucho más profunda, si hubiese sido al revés, era lo mismo”.

Repasando lo vivido en los días previos al domingo pasado, el Tata llegó a una conclusión: “Creo que hubo un punto de la semana donde lo ideal y lo lógico era que el partido se suspendiese, no hacía falta llegar a lo del domingo. Teníamos síntomas y cosas reales que demostraban que el partido no se podía jugar”, sintetizó.

Y cuando le preguntaron siesta situación le sacó energías al plantel y al cuerpo técnico a pocas semanas del inicio de la competencia, el DT sentenció: “A mí sinceramente no, porque tengo una mirada muy pesimista del fútbol argentino y día a día reconfirmo esto, aunque lamento decirlo”.

Hablemos de fútbol

El Tata reconoció que tanto Maxi Rodríguez como Heinze “están muy bien”, y en cuanto al Gringo aclaró que su ausencia en la lista de concentrados para el finalmente frustrado clásico se debió a un problema personal: “No nos parecía lógico porque su cabeza estaba donde debería estar, necesitábamos darle tranquilidad”, contó.

Pasando al tema refuerzos, prácticamente echó por tierra el nombre del delantero de Boca Nicolás Blandi, que había surgido en esta jornada: “Blandi me gusta como jugador, pero en tanto Nacho (Scocco) y Maxi (Urruti) sigan en el club, no hay posibilidad de traer un nueve”.

“El año pasado trajimos siete u ocho refuerzos, no es que no trajimos. Preferimos quedarnos como estamos si no encontramos el jugador que nos sea de utilidad”, cerró Martino.