La Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana realizó entre el viernes a la noche y el sábado a la madrugada distintos procedimientos preventivos y de control vehicular con el resultado de 21 vehículos trasladados al corralón municipal. De ese número, en 16 casos fue por ingesta de alcohol de los conductores por encima de los niveles permitidos.

El secretario de Control y Convivencia, Pablo Seghezzo, precisó que se concretaron 107 inspecciones en las zonas más frecuentadas de la ciudad. Las intervenciones fueron realizadas junto a personal de la Unidad Regional II de la Policía de Santa Fe.

Del total de fiscalizaciones llevadas adelante, 21 finalizaron en remisiones de los vehículos en cuestión al depósito municipal. De ese número, 16 fueron por alcoholemia positiva.

“Son 16 los autos trasladados al corralón luego de que sus conductores obtuvieron positivo en los controles de alcohol en sangre”, ahondó y agregó: “El porcentaje más alto encontrado fue de 2.08”. “Los restantes son unidades cuyos titulares no pudieron acreditar en tiempo y en forma la documentación requerida”.