Fernanda Serna integra junto a un grupo de mujeres la Asociación de Mujeres en Lucha. Todas llevan marcas parecidas, la de la violencia machista. El lunes pasado, debieron atender unos 20 casos en los que distintas mujeres aseguraron haber sido agredidas por sus parejas. Sin embargo, esas situaciones no pueden avanzar correctamente por el camino de la Justicia, según denunció. Hay, de acuerdo a lo que indicó, muchos obstacúlos que impiden que los victimarios terminen tras las rejas.

"Mi pareja me quemó el 45% del cuerpo hace 3 años y está libre,trabaja en el poder judicial", señaló en diálogo con los periodistas Roberto Caferra y Almudena Munera (Radiópolis, Radio 2). Fernanda se refiere a lo que le pasó el 17 de mayo de 2013. Ingresó al Centro de Quemados del Sanatorio Británico con quemaduras de segundo grado luego de que su ex la prendiera fuego. Sin embargo, “no pasó nada” con él, quien aún hoy goza de libertad. Todavía no se pudo probar que hizo lo que hizo y para Fernanda, como para muchas otras mujeres, las huellas que la violencia deja en sus cuerpos y en su afectividad, no son pruebas suficientes.

Su actividad en la organización que creó, la lleva a conocer muchos casos como el suyo: “Es una estupidez al lado de las cosas que escucho de tantas mujeres vulneradas”, señaló. Desde que acompaña a víctimas de violencia de género, considera que ha habido algunos avances en la atención judicial pero todavía, cree que queda mucho por hacer.

“Me prendieron fuego y se me ríen, imaginate lo les pueda pasar a otras mujeres en estos casos”, remarcó. En ese sentido, el año pasado se encadenó junto a otras compañeras víctimas en las puertas de Tribunales para exigir que se proceda.

“En los casos como el mío, no hay vida después. Cuando vos sabés que vas a seguir siendo agredida, no la hay”, manifestó al tiempo que contó que su ex pareja suele comunicarse con ella para maltratarla y amenazarla. En ese sentido, apuntó al uso de perfiles truchos en Facebook de parte de los agresores para continuar en contacto con las víctimas. “Fui a la Fiscalía y comenté que me pasaba esto pero me dijeron que no se podía probar que era él”, destacó.

En cuanto a su vida personal y afectiva, Fernanda todavía no logra reacomodarse. “Volver a estar en pareja es muy difícil, te dice una palabra que te hace volver atrás y querés salir corriendo”, observó.