Los expertos en educación y empleabilidad no tienen ninguna duda sobre ello: las competencias en lenguajes de programación ya tienen tanta relevancia y atractivo, como las competencias idiomáticas.

Dominar la programación ha dejado de ser una habilidad limitada a los profesionales del sector de la informática, en parte, gracias a las formaciones online, MOOCs y cursos especializados que permiten que esta formación especifica sea más accesible y complementaria para diferentes tipos de perfiles profesionales.

Esto también se debe a todo el peso que ha tomado la tecnología y la innovación digital en cualquier empresa o actividad empresarial, lo que conduce a que haya más demanda laboral relacionada con la informática y que sea una competencia que se traduzca en éxito laboral con facilidad.

Los lenguajes de programación

Los avances y sistemas empleados en el ámbito de la informática varían y avanzan a un ritmo vertiginoso, lo que implica que los profesionales de este ámbito, y otros relacionados, necesiten estar en continua formación y se adapten con agilidad a las novedades que surgen.

Los cursos específicos permiten que el acceso a estos conocimientos sea más accesible y rápido, tanto para profesionales especializados, como para otro tipo de perfiles que buscan el desarrollo de competencias más atractivas y demandadas.

Es normal que, si no estás muy familiarizado con este ámbito, no sepas por qué lenguaje de programación empezar o cuál es el idóneo para tus objetivos.

JavaScript: Un 62,5% de los programadores lo usan y es el más demandado por las empresas, además que permite desarrollos multiplataforma.

Swift: Lo creó Apple para el desarrollo de sus apps y programas en IOS.

Python: Es el rey en las tareas de backend y es el mejor para el tratamiento de datos.

Elixir: Es propio de los desarrolladores web y un 30% de los programadores lo eligen.

R: Es el lenguaje más empleado en el campo de la estadística y la analítica de datos.

La reorientación profesional hacia los empleos del futuro conlleva renovar competencias y entender el peso e implementación de la tecnología en cada ámbito de trabajo.

Fuente: Universia España