Conforme a la postura que ya se venía sentado desde el socialismo santafesino, el gobernador Antonio Bonfatti remarcó este lunes que no está en los planes del partido alinearse a Cambiemos, como sí lo harán otros espacios políticos que también integran hoy el Frente Progresista Cívico y Social, que gobernará la provincia otros cuatro años.

“Vamos a seguir manteniendo la identidad como Frente Progresista Cívico y Social, es lo que el partido socialista va a seguir defendiendo”, sentenció el mandatario saliente desde Santa Fe capital.

Sostuvo que dicha alianza “es una construcción que tiene 20 años” y es allí donde seguirán apostando, más allá que desde el radicalismo, la Coalición Cívica y el Partido Demócrata Progresista (PDP) provinciales ya adelantaron su intención de alinearse a la estructura que conducirá el Estado nacional.

La posición de Bonfatti es coincidente con la que ya había expresado su ministro de Gobierno, Rubén Galassi, que días atrás también resaltó que el Frente Progresista Cívico y Social “es una construcción política que lleva más de 20 años y hay que ser respetuosos de esa realidad”.

En esa oportunidad, el funcionario vio “apresurado e inconveniente reencaminar el proceso” del espacio que compone y graficó: “Hoy no me imagino, y lo digo a título personal, discutiendo en una misma mesa con Carlos Reutemann y Miguel Del Sel. No se trata de descalificarlos, sino de que pensamos distinto”.

También el gobernador electo, Miguel Lifschitz, deslizó una negativa al ser consultado sobre la posibilidad de una integración a Cambiemos.

Por otro lado Bonfatti, en diálogo con la prensa este lunes, se refirió a los nombres del gabinete de Mauricio Macri y dijo que “hay que esperar que empiece a funcionar”, ya que, considera, “opinar sobre personas y no sobre gestión es improcedente”.

En otro orden, el jefe del Estado santafesino habló de la polémica instalada por la designación del radical Maximiliano Pullaro como ministro de Seguridad de la provincia ante su condición de diputado electo.

Ante la incompatibilidad de ambas funciones, el gobernador declaró: “Si va a asumir como ministro, estimo que no va a jurar como diputado. Jurar para asumir la semana siguiente como ministro me parece que no es ético”.

Según trascendió, Pullaro analizaba la posibilidad de iniciar formalmente su cargo como legislador para garantizar una banca para la UCR, ya que, en caso de no hacerlo, en la línea de sucesión entraría a la Cámara baja Ariel Bermúdez, también frentista pero miembro de la Coalición Cívica.