Al menos cuatro personas han muerto en los últimos días a causa de la ola que afecta al suroeste de Estados Unidos. El fenómeno meteorológico provocó además, la cancelación de decenas de vuelos en esta zona del país.

Las primeras víctimas de las altas temperaturas se registraron el lunes en el condado de Santa Clara, en el estado de California, y fueron identificadas como un hombre de 72 años y una mujer de 87 años. Las otras dos víctimas mortales son un hombre de 57 años y su hijo de 21, que fallecieron en el parque nacional de Carlsbad Caverns, en el estado de Nuevo México, según medios locales.

Los termómetros han llegado a marcar hasta 52 grados centígrados en zonas de Nevada, California y Arizona. Debido a esta situación, la compañía American Airlines tuvo que cancelar el martes cerca de medio centenar de vuelos regionales con salidas después del mediodía desde el aeropuerto internacional Sky Harbor, cercano a Phoenix.

Con estas altas temperaturas también está en riesgo el servicio eléctrico, por lo que compañías del sector han pedido que se reduzca el consumo durante los próximos días a sus clientes en California, donde en Sacramento estaban previstas para máximas de 41 grados centígrados y en Fresno de 43 grados. El operador independiente de la red eléctrica en California, donde ya se han registrado caídas del fluido, pidió a los consumidores no encender las luces y aparatos eléctricos que no sean imprescindibles entre las 14 y las 21 horas para evitar el riesgo de sobrecarga en el sistema.

Johana Molina, portavoz del departamento de Salud Pública del condado Maricopa, al que pertenece Phoenix, dijo que han emitido una advertencia sobre el calor excesivo que se extenderá toda la semana. "El calor es un asesino silencioso. Cada año muere mucha gente, porque se confían, y es cuando llega el golpe de calor", comentó.

Mencionó que aparte de la suspensión de vuelos, gran cantidad de parques en el condado se han cerrado para evitar que los menores se deshidraten y decenas de refugios han sido habilitados para brindar ayuda a la comunidad. "Definitivamente los niños y la gente mayor tienen altos riesgos en esta época. También deben de cuidarse quienes tienen una condición crónica, porque el calor los predispone a perder la vida", advirtió.

En Estados Unidos mueren un promedio de 658 personas por año a causa del calor, según las estadísticas más recientes de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). las altas temperaturas también han contribuído a la propagación de varios incendios forestales en California y cientos de hectáreas han quedado calcinados en el área del Big Bear en las últimas horas.