Sentido, gusto, olfato, tacto y vista. Cinco sentidos y el olfato siempre suele ser el menos valorado, el que más personas eligen si se les pregunta de cual prescindiría si tuviese que renunciar a uno de ellos.

La nariz, además de marcar la fisionomía de cada uno, es uno de los apéndices más ignorados y más sorprendentes. A continuación, diez cosas que no sabés de ella:

1. El olfato es el único sentido que se fatiga. Ante los malos olores, el organismo se da cuenta de ellos a través de la nariz pero pasados unos minutos, es posible que el cerebro se adapte. El resto de sentidos del cuerpo humano no cuentan con esta peculiaridad. 

2. Su desarrollo se puede prolongar hasta la adolescencia. El desarrollo del olfato va ligado al del cráneo por lo que no se recomienda operar la nariz en mujeres hasta los 15 o 16 años, y en hombres hasta los 17 años. Con el paso de los años, se puede alargar y los cartílagos se caen por el efecto de la gravedad y también se rompen los ligamentos que los sustentan.

3. La memoria olfativa es la más poderosa del ser humano. El sentido del olfato está conectado directamente con la parte del cerebro que está asociada a la atribución de las respuestas emocionales y la memoria. Un olor puede trasportarte a una etapa de tu niñez: el olor es el sentido que más conectado está con nuestros recuerdos emocionales.

4. Las primeras intervenciones datan del año 3.000 a.C. Los médicos egipcios realizaban intervenciones en la nariz hace más de 3.000 años de antigüedad, según recogen algunos documentos históricos. Se trata de una operación de reconstrucción que se realizaban tras los conflictos bélicos.

5. Una disciplina ancestral china relaciona su forma con un buen matrimonio. Según el 'Face Reading' asiático, las personas de nariz recta, sin cicatrices y grande tienen buena suerte en el matrimonio.

6. Acondiciona el aire. Entre sus funciones se encuentran las de humidificar, calentar y limpiar el aire que entra en nuestro cuerpo hacia nuestros pulmones. Respirar por la nariz correctamente es vital para evitar posibles patologías.

7. Puede sufrir de anosmia. Si la nariz deja de percibir los olores, el olfato puede llegar a verse abolido completamente. Estos casos se conocen como anosmia y consisten en la pérdida de la función del sentido del olfato. Aproximadamente más del 15% de la población tiene algún grado de pérdida del olfato.

8. Es la parte más pronunciada del rostro. La nariz suele ser la zona de la cara en la que más nos fijamos al conocer a alguien si no es armónica, y por el contrario cuando destaca por su belleza nos fijamos menos en ella, mirando más los ojos y labios. Por ello, marca los rasgos característicos y es una de las partes del cuerpo que más se operan.

9. Cuando se miente, la nariz no crece pero cambia de temperatura. Científicos del departamento de Psicología Experimental de la Universidad de Granada publicaron en un estudio que cuando una persona miente cambia la temperatura de la punta de su nariz, conocido como 'efecto Pinocho'. La UGR explicaba que cuando una persona miente la temperatura de la punta de su nariz aumenta o disminuye, a la par que también aumenta su temperatura corporal en la zona del músculo orbital.

10. El olfato es capaz de distinguir más de un billón de olores. Un experimento del Laboratorio de Neurogenética de la Universidad Rockefeller, en Nueva York, revela que el sentido humano del olfato puede detectar más de un billón de mezclas de olores. Los autores del trabajo probaron la capacidad de los voluntarios y alcanzaron sus conclusiones sobre la base de la sensibilidad de la nariz y el cerebro.