Un pastor asegura que puede sacar adelante a Rosario Central. Si lo dejan. A la espera de que lo convoquen desde la dirigencia del club de Arroyito, asegura que para él es posible devolverles la felicidad a los hinchas de cara al próximo invierno. ¿Qué planes tiene para “barrer la mala onda” de la cancha?
En diálogo con el programa Radiópolis (Radio 2), Juan Bosso –“maestro en la palabra, conferencista, escritor cristiano, consejero del Club 700”, según se presenta en su página web– reveló su interés en desembarcar en la ciudad a fin de sacar a Central de la mala racha que lo mantiene en la B Nacional. “¿Ustedes quieren o no quieren?”, ironizó de entrada y observó: “Tienen un técnico de primerísima línea, jugadores que son los mejores de la sivisión y las cosas no se concretan. Hay dos mundos, el que vemos y el espiritual, y los equipos están atados”.
Aunque admitió que todavía no fue convocado por el club, confía en que es cuestión de tiempo su llegada a la institución a fin de “barrer la mala onda”. “Tiene que haber alguien que lo haga, la mala onda está en el vestuario, en el campo y en vestuario del referi”, precisó. Sobre este último dijo: “Juega con mucha presión, no tiene hinchada”.
Consultado sobre su “modus operandi”, Bosso sólo reveló algunas cuestiones: “Muchas personas fallecen y sus cenizas son esparcidas. Se va formando un campo santo y se complica. Yo hago liberación de todo eso”, sostuvo. Pero no sólo tiene que ver con los muertos: “Muchos jugadores les piden ayuda a la señora de la otra cuadra y dejan amuletos, y todo eso se carga con mala onda”, agregó.
El pastor se tiene fe. Según contó, pudo levantar a Huracán y a Argentino Juniors a partir de su intervención. Ahora, sólo falta que lo llamen desde el club para hacer lo suyo en Rosario. Sin echarse para atrás, consideró que su llegada a Arroyito sólo puede ser exitosa y no dudó en garantizarle a los canallas un feliz invierno 2013.
¿Y a cambio? Evitó las preguntas del periodista Roberto Caferra en torno a sus honorarios y sólo deslizó: “Estoy al servicio de Dios pero tengo que comer y tengo familia”. Resistente a precisar cifras, sólo dijo, entre risas, que cobra menos que los jugadores. Menos mal.
Juan Bosso (Radio 2)
