"Mediante el uso de prácticas y herramientas educativo-terapéuticas específicas se brinda a los pacientes un tratamiento con las últimas técnicas de rehabilitación, lo que posibilita su reinserción en el ámbito social, familiar y laboral", explicó Raúl Muda, fundador y director del Grupo Medihome, donde funciona el Centro de Medicina Física y Rehabilitación (Cemefi).

La rehabilitación virtual, que estimula a través del juego, consta de tres elementos: un televisor, una consola Xbox y un sensor llamado Kinect.

El sensor emite una alfombra infrarroja en el piso que lee los movimientos corporales y los representa a través de un personaje animado en la pantalla, planteando desafíos a los pacientes.

Juan Pablo Félix, kinesiólogo y fisiatra, detalló que "la creatividad e innovación son dos recursos que deben ser utilizados en patologías neurológicas para lograr que el tratamiento se realice en forma integral".

"El paciente nunca debe ser sometido al tratamiento, sino que debe formar parte, involucrarse fisicopsíquicamente para aprovechar al máximo sus capacidades motrices y cognitivas. Poder reír es alguno de los beneficios que contribuyen a la mejora de los síntomas", aseguró.

Para que el tratamiento funcione, la persona debe adaptar la realidad virtual a sus necesidades: gestos deportivos, de baile o musicales son algunas de las opciones que se pueden simular.

"Al fomentar el desarrollo de estrategias de movimiento no sólo se estimula una nueva esquematización corporal, sino que se activan nuevas interconexiones neuronales correspondientes con el concepto de neuroplasticidad", explicó Félix.

Roque, un paciente con Enfermedad de Parkinson, contó que el tratamiento le hizo acordar a su juventud, cuando jugaba al fútbol.

"Practicaba fútbol en forma constante y el tratamiento me hizo acordar a eso, a esa capacidad de resolver situaciones en forma rápida, como despertando una memoria muscular. La rehabilitación virtual me distrae y me atrae, yo sé que estamos jugando pero tengo que estar atento siempre a lo que viene y me fascina", compartió.

En ese sentido Félix afirmó que "un paciente con antecedentes de práctica deportiva puede convertirse gradualmente en un eximio futbolista, jugador de bowling, o voleibolista; uno con antecedentes musicales puede ser guitarrista o baterista, o simplemente cantar o bailar, todo en una misma sesión".

Así, el paciente se puede encontrar surfeando en el océano, practicando deportes en estadios colmados, esquivando obstáculos en la selva o actuando sobre un escenario, ya que la calidad visual y sonora hacen que el concepto de realidad se aprecie al máximo.

Luego de finalizar la sesión, el dispositivo usa sus sistemas de análisis de información -como videocaptura y fotografías- para crear bases de datos y seguimientos de las sesiones.

"En la evaluación clínica pudimos observar que la capacidad de memoria muscular que se logra activar en los pacientes es de gran valor terapéutico, y también permite muchas veces reactivar cualidades de desarrollo psicoemocional", agregó Félix.

Se observó además una "notable disminución de síntomas como rigidez muscular y temblores en pacientes con Parkinson no sólo durante la sesión, sino perdurables en el tiempo, y además hubo adaptaciones en el reconocimiento del esquema corporal en pacientes con accidentes cerebro vasculares, reconocimiento de patrones de movimiento, mejorías en el reconocimiento temporo-espacial y disminución de la espasticidad", completó.

Por último, los especialistas informaron que este tipo de rehabilitación virtual se puede combinar con el tratamiento convencional en gabinete, involucrando a los padres y familiares de los pacientes.