Ludueña fue escenario, este miércoles, de cuatro hechos de intensa violencia. En cadena, uno tras otro, se sucedieron un homicidio, dos ataques a balazos y hasta el derrumbe de una casa. Lo último que tuvo lugar tras el crimen de Damián Gómez de 20 años, en manos de un supuesto narco de la zona, fue la venganza de sus dos hermanos, quienes según trascendió, abrieron fuego contra tres personas que serían allegados al que señalan como homicida.
En contacto con el programa Radiópolis (Radio 2), el fiscal Adrián Spelta, confirmó que luego del crimen que tuvo lugar ayer en Teniente Agnetta y Casilda, no sólo se produjo una revuelta de vecinos que derrumbaron a mazazos la vivienda donde se registró el crimen y un ataque intimidante de dos motociclistas contra periodistas e investigadores presentes en el lugar; sino que también se registró la agresión con arma de fuego contra 3 personas, una de ellas gravemente lesionada.
“En el transcurso de la tarde–cerca de las 19– pasaron por un domicilio personas que efectuaron disparos. Serían dos personas, los hermanos del joven fallecido, quienes ya fueron individualizados”, sostuvo el fiscal. Las personas que resultaron heridas, de acuerdo a las precisiones señaladas por el periodista Hernán Funes, son un hombre de 22 años que fue baleado en una pierna, una joven de 26 años con un disparo en una pierna y un chico de 20 años que recibió un disparo en la cabeza. Éste último estaba en grave estado.
Spelta confirmó que existen dos hipótesis de investigación. Por un lado se cree que existió una disputa entre el agresor y la víctima por temas vinculados a las drogas pero no descartan que hayna mantenido una relación tensa desde hace algún tiempo.
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