En los controles de rutina realizados por la Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana entre la noche del pasado viernes y la madrugada de este sábado, unos 27 vehículos terminaron en el corralón. De esa cifra, 18 fueron por alcoholemia positiva, entre los cuales se detectó un taxista. La graduación más alta entre las motos fue de 2.17 gramos y entre los autos de 1.55.

De los 163 controles de alcoholemia desarrollados, 21 autos, 5 motos y un taxi fueron remitidos al corralón. Hubo 18 casos positivos de alcohol en sangre, mientras que el resto fue por falta de papeles o medidas de seguridad. Por su parte, la graduación más alta entre las motos fue de 2.17 gramos y entre los autos de 1.55.

En el caso del taxi Chevrolet Corsa dominio NQZ 797, se lo detectó con 0,41 miligramos de alcohol en sangre. Cabe destacar que los conductores de cualquier transporte público no pueden tener dicha sustancia en sangre. 

“Seguimos poniendo mucho énfasis en todas las áreas de control, para generar un tránsito más seguro. Queremos erradicar definitivamente el alcohol al volante, hemos tenido grandes avances en esa materias pero debemos seguir avanzando”, relató el Secretario de Control y Convivencia Ciudadana, Pablo Seghezzo.

“En lo que va del año ya hemos remitido más de 3500 vehículos al corralón, por lo que seguimos insistiendo en que se debe cumplir la norma, ya que quien no cumple con la misma está vulnerando los derechos de otro ciudadano”, finalizó Seghezzo.