Un joven tetrapléjico ha conseguido recuperar la sensación del tacto gracias a un brazo robótico controlado mentalmente por su cerebro, tras ser microestimulado por una interfaz conectada a un ordenador, según han anunciado investigadores de la Universidad de Pittsburgh (UPMC), quienes han desarrollado esta tecnología.

Este avance, que ha sido publicado en Science Translational Medicine y comunicado por 20minutos.es, demuestra que la microestimulación intracortical de la corteza cerebral ofrece un gran potencial en la creación de neuroprótesis sensoriales para restaurar la sensación táctil.

El primero en probarlo ha sido Nathan Copeland, un joven de 28 años, quien experimentó el tacto en varios de sus dedos después de que el equipo de expertos, dirigido por el doctor Robert Gaunt, profesor asistente de medicina física y rehabilitación a Pitt, implantara electrodos en su cerebro.

"El resultado más importante de este estudio es que la microestimulación de la corteza sensorial puede provocar sensación natural en lugar de hormigueo", ha señalado el coautor del estudio Andrew B. Schwartz, profesor de neurobiología de la Universidad de Pittsburgh.

Los investigadores destacan que la estimulación es segura y las sensaciones evocadas son estables durante meses. "Todavía hay gran cantidad de trabajo que realizar en esta investigación para entender mejor los patrones de estimulación necesarios para ayudar a los pacientes a realizar mejores movimientos", ha añadido.