La fiscal contravencional y de faltas de la Ciudad de Buenos Aires Andrea Scanga, de la Unidad Fiscal Este, aplicó las pautas de un protocolo local y encomendó a las fuerzas de seguridad apostadas en el lugar que liberen los carriles cortados por organizaciones sociales en el marco de la protesta nacional de ATE contra el gobierno de Cambiemos.

El gremio de los estatales ATE, agrupaciones sindicales, kirchneristas y de izquierda protagonizan distintas concentraciones y piquetes en plena 9 de Julio, en la previa a la manifestación a Plaza de Mayo. A su vez, en la zona del Obelisco, sectores ligado al kirchnerismo como Quebracho y Miles también se sumaron a la primera gran movilización contra Mauricio Macri.

La izquierda, de la mano del MAS y el PTS, inició la jornada de lucha con un piquete a las 7 en Callao y Corrientes y luego se movilizó a otras arterias del microcentro porteño. También hay concentraciones en la esquina de la avenida Belgrano y Bernardo de Irigoyen.

Por su lado, becarios del Conicet realizaban esta mañana un acto frente al Ministerio de Ciencia y Tecnología de la Nación en Palermo.

Se trata del protocolo que dictó la Fiscalía General de la Ciudad de Buenos Aires en 2003, “muy similar –dijeron fuentes judiciales- al que aprobó días atrás el Ministerio de Seguridad de la Nación”.

El protocolo de la Fiscalía General prevé que ante un corte se debe intimar a su cese, continuar la protesta sin interrumpir la circulación o liberar carriles.

Ayer, la Cámara Penal Contravencional y de Faltas de la Ciudad de Buenos Aires rechazó un habeas corpus preventivo para que el protocolo antipiquetes no se aplique en la ciudad de Buenos Aires frente al paro nacional de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE).

El habeas corpus reclamaba que los efectivos de las fuerzas de seguridad fueran desarmados a las manifestaciones y que si había detenidos queden bajo la esfera de la Justicia local.