Una niña de cuatro años murió tras caer a una profundidad de 150 metros al borde del Gran Cañón, en el estado norteamericano de Arizona, según informó el martes el diario "Arizona Republic".

El padre de la pequeña acudió de inmediato en ayuda de la niña, pero sus intentos de revivirla fueron en vano.

El lugar, ubicado en el parque nacional, no está asegurado por rejas.

Según las autoridades del parque, es la segunda caída mortal en el Gran Cañón en lo que va del año.

Según una portavoz, en este caso se trata de la persona más joven que haya muerto por una caída en este sitio de atracción turística.

Fuente: Télam.