Familiares y amigos de Gerardo “Pichón” Escobar iniciaron este martes una vigilia frente a los Tribunales Federales de Entre Ríos al 400 de cara a la audiencia de este miércoles a las 8.30, cuando la Cámara Pena tratará las libertades dictadas por el juez Marcelo Bailaque a los cinco imputados.

El abogado de la familia Escobar, Guillermo Campana, aseguró a Telenoche (El Tres) que pese al fallo del magistrado en primera instancia sostienen su pedido de haber llevado el caso desde la Justicia provincial a la federal. Recordó que la custodia del boliche “La tienda”, donde se lo vio por última vez a la víctima, estaba “conformada por policías de la provincia y por eso era indispensable que debía ser investigado bajo desaparición forzada y por el fuero federal”.

Sobre la responsabilidad que la querella atribuye a los acusados, dijo: “Los cinco tuvieron participación en el primer momento -desaparición de Escobar- y saben lo que pasó con Gerardo luego -fue encontrado sin vida en el río-”.

Campana se mostró muy crítico de la actuación de Bailaque, pidió “profundizar la investigación” porque consideró que el juez “no ha investigado”. “Sólo tomó indagatorias que no aportaron nada y a partir de eso dictó el fallo”, añadió y señaló que pareciera que el magistrado esperó que “los mismo imputados se autoincriminaran”, algo a todas luces “ingenuo”.

También afirmó que el magistrado “analizó las pruebas por separado y no como un conjunto” y marcó como de “alta gravedad institucional” que considere que el ingreso no registrado a una comisaría -como ocurrió con Pichón- “no debe ser caracterizado como clandestino, algo establecido por tratados internacionales y por la ley”.

Luciana Escobar, hermana de la víctima fatal, fue concreta: “Pedimos que se investigue como tiene que investigarse. Fue una decisión muy arbitraria la que tomó el juez”.

La vigilia sobre Entre Ríos entre Tucumán y Entre Ríos comenzó a la tarde con actividades de apoyo al reclamo. “La investigación está parada; la lucha, no”; es la consigna de la Multisectorial de justicia por Pichón. 

Los camaristas Guillermo Toledo, Elida Vidal y Edgardo Bello –los mismos que consideraron que la causa debía pasar al fuero Federal como desaparición forzada– deberán revisar ahora la decisión de Bailaque que hace casi dos meses liberó y sobreseyó a tres patovicas y dos policías que trabajaban como seguridad del boliche La Tienda, el último lugar en el que estuvo Escobar antes de ser hallado muerto en el río en agosto de 2015.

La teoría del caso para la querella es que tras salir del boliche, Pichón fue atacado por uno de los patovicas, Cristian Vivas, y luego trasladado a la comisaría 3ª donde su ingreso no fue registrado y fue víctima de una golpiza que acabó con su vida. Sin embargo, Vivas aseguró que nada de eso ocurrió y que padeció un "año de cárcel injusta". Tras recibir la causa, Bailaque desvinculó a los detenidos.