En las últimas horas, Netflix estrenó “Soy Georgina”, la serie que muestra cómo es la ostentosa vida de la argentina que enamoró a Cristiano Ronaldo. Por si fuera poco, este jueves el portugués pidió iluminar el Burj Khalifa de Dubai, con la imagen de ella para festejar sus 28 años.

 “Soy Georgina Rodríguez, tengo 27 años, y hace cinco años mi vida cambió”. Con esa frase el docu-serie sobre la vida de la mujer de Cristiano Ronaldo.

Allí, Georgina abre las puertas de su casa y muestra la versión oficial de su día a día como la compañera del delantero del Manchester United, uno de los jugadores mejores pagos del mundo.

Con casi 30 millones de seguidores en Instagram, Rodríguez logró pasar de contar su vida en las redes sociales a protagonizarla en una de las plataformas de streaming más visitadas del mundo.

En la serie se revela su costado más íntimo: la maternidad, la convivencia con los hijos de Ronaldo, su relación de pareja, sus viajes, sus casas y sus fiestas.

El reality se sucede entre una extensa entrevista en donde Georgina, vestida de negro y sentada en un sillón del living de su casa, cuenta su vida y las imágenes de esa misma vida que para la mayoría de los mortales -incluso para ella antes de enamorarse de un crack- parece inalcanzable.

 “Sé lo que es no tener nada y sé lo que es tenerlo todo”, dice, y explica que para ella las cosas no han sido fáciles.

Sin embargo, el reality no busca ser una historia de superación, y de inmediato ese pasado difícil queda desvanecido entre autos de lujo, aviones privados y vestidos de diseñador.