El empate frente a Aldosivi fue una muestra acabada de la situación que está atravesando Newell's como equipo y también desde lo institucional. Durante este año ya pasaron tres técnicos y los resultados no cambiaron.
"Hace 7 años que es un desastre la institución" disparó Nacho Scocco tras el partido. Estas declaraciones llamaron la atención de todo el pueblo leproso y surgieron varias preguntas al respecto. ¿Por qué no lo dijo antes? ¿Por qué no comentó como estaba la situación cuando desfilaban los técnicos por el Parque?
Es evidente que la gente, que volvió a la cancha, que expresa su opinión, en esta ocasión contra el Tiburón de Mar del Plata, dio su veredicto sobre lo que los propios jugadores muestran en el terreno de juego. Los insultos así lo dejaron claro.
Scocco habló de los últimos siete años, que incluye a varios directivos involucrados en las decisiones que se tomaron. Sorprende que no haya dicho antes lo que le preocupaba del club, tal vez se hubiese podido resolver algunos de los temas que le preocupaban, pero lo cierto que lo dijo post-partido. La disconformidad bajó de todos los costados del Coloso y precisamente no eran para los ex directivos de la institución, sino para todos los jugadores.
Lo cierto que comenzó un nuevo ciclo con Adrían Taffarel como DT, que no quiere dejar pasar su oportunidad, que quiere sacar de este momento al equipo y mostró un poco de lo que pretende para este desafío que tendrá de ahora en adelante.
A Cacciabue lo atrasó unos metros cubriendole las espaldas a Castro, Sordo y Comba. Eso hizo que en la mitad haya mas equilibrio. A Nacho Scocco lo sacó del área para que pueda abrir la defensa y luego el ingreso del chico Pancho Gonzalez le dió mas actitud, despliegue y dinamismo al conjunto leproso que logró contragolpes importantes que pudieron haberle dado el triunfo en el Coloso.
Taffarel no es responsable de lo que heredó, pero sí puede ser responsable de lo que realice de acá en adelante. Comenzó con un empate con sabor a poco. Es sabor a la realidad que le va a tocar manejar.
En este primer encuentro, sin jugar bien, hubo un cambio de actitud, mostró algunas cosas interesantes con un plantel que no tiene jerarquía. Tendrá que hacer un esfuerzo extra para que el conjunto rojinegro levante el nivel futbolístico y de esta manera convencer a los directivos de que puede continuar en el 2022.
Hasta ahora, los jugadores no sabían demasiado que pensaban los hinchas porque la gente no concurría a los estadios, pero a partir de este jueves ya saben lo que sienten porque ni bien Dóvalo pitó el final los silbidos e insultos se hicieron escuchar y los apuntados eran los protagonistas, no los directivos. Ellos ya tuvieron su respuesta en las urnas el 19 de setiembre.
