Dos escruches en el mismo fin de semana. A ras del suelo y en altura. Ladrones ingresaron el sábado en un departamento del piso 13 de un edificio céntrico, y el domingo, en una casa de barrio Belgrano.
El primer caso se registró, según estimaciones de Marcelo, la víctima, el domingo por la madrugada. El sábado había salido con su esposa alrededor de las 21 y cuando volvieron el día siguiente encontraron todo revuelto. El hecho los tomó absolutamente por sorpresa ya que viven en el 13º piso de un edificio de Pellegrini al 1200 y las puertas de ingreso –de la planta baja y de su piso– no estaban violentadas.
Los ladrones ingresaron desde la terraza del edifico vecino, por el balcón. Forzaron las rejas de la medianera y de la ventana. En ese momento, llovía torrencialmente en la ciudad y los ruidos pasaron desapercibidos.
Para Marcelo, los delincuentes actuaron con información sobre sus movimientos porque se dirigieron directamente a los lugares donde tenían sus cosas de valor: cámara de fotos, notebooks, joyas y relojes.
En tanto el segundo hecho ocurrió en una vivienda de Santa Fe al 6200 donde vive una docente jubilada que el domingo dejó la casa sola para pasar el Día del Padre en Funes. Cuando regresó, encontró la puerta de entrada violentada. Cree que los delincuentes saltaron la reja de la vereda y patearon la puerta. Se llevaron su notebook con las fotos de sus nietos y ex alumnos, que es lo que más lamenta.
