El dueño de una casa de barrio Echesortu fue víctima de un escruche este sábado. Regresó a su domicilio de Valparaíso al 1000 cerca de las 20, cuando detectó desde afuera que había luces prendidas que él no había dejado. Llamó a la Policía y luego ingresó en la vivienda, donde constató que habían entrado ladrones.

Según informaron fuentes policiales, la víctima, de 63 años, decidió llamar a la Policía porque sospechaba que había delincuentes en su casa, ya que recordaba haber apagado las luces del interior y ahora observó que estaban prendidas.

Cuando llegó un patrullero a Valparaíso y San Juan, los agentes ingresaron con el hombre y notaron que había un gran desorden en el interior. A simple vista le faltaban 4 mil pesos. Luego vieron que una reja que da al patio trasero estaba violentada.