El asalto a un quiosco de Villa Gobernador Gálvez ocurrido el 2 de agosto pasado derivó en detenciones y en una audiencia imputativa donde fueron acusados uno de los ladrones, dos policías que le robaron al delincuente, un preso y una empleada del negocio que "entregaron" información para la ejecución del plan.

El robo se realizó con una mecánica similar a la de otros hechos similares. Cerca de las 16.30 del 2 de agosto, Kevin Jesús O., de 19 años, y otra persona aún no identificada llegaron al quiosco de Constitución al 500 abordo de dos motos, sacaron un arma de fuego, amenazaron a la dueña del comercio, a las empleadas y se llevaron unos 43 mil pesos –parte de la caja y otra parte de la pensión de la madre de la víctima– y celulares.

Según la imputación del fiscal Federico Rébola, el asalto fue planificado por Alexis A., un interno de la Unidad Nº 3 que está en pareja con la madre de Kevin O., uno de los ladrones. Fue ese recluso el que se encargó también de hacer llegar una moto robada –y sin patente– y un arma a su hijastro para la ejecución del robo. 

Kevin O. fue detenido por una pareja de policías en inmediaciones de Gaboto y Alsina, cuando el delincuente se desplazaba con la moto robada a contramano. Allí se constató que el vehículo tenía pedido de captura. Sin embargo, los suboficiales del Comando Radioeléctrico Samuel Francisco V. y Flavia Soledad F. robaron los 43 mil pesos que llevaba el maleante producto del asalto anterior en Villa Gobernador Gálvez.

El robo de los policías al delincuente Kevin Jesús O. se desprende de una conversación del preso de la Unidad Nº 3 con su pareja, madre del ladrón que le pedía explicaciones: "Había un laburo en Gálvez. Fueron, lo chorearon, se llevaron toda la plata y se vinieron. Se mandó en contramano y lo paró la policía. Va a salir porque lo agarraron con la moto nada más. Sale porque no tiene ningún antecedente más".

"Encima él había sacado plata y la tenía en el bolsillo y se la agarraron todos los policías", le agregó la mamá del ladrón a su pareja que está en prisión. 

En el transcurso de la investigación, llamó la atención a la dueña del quiosco que los ladrones tenían datos precisos. Pedían puntualmente "una caja negra y oro", que no se encontraba en el inmueble. Es más, el asalto ocurrió un lunes, día previo al pago de proveedores, por lo que suele acumularse efectivo. Por ese motivo, el fiscal avanzó hacia la entrega de datos por parte de gente del entorno de las víctimas. 

Con esa hipótesis de participación de alguien conocido de las víctimas, el fiscal Rébola posó la sospecha sobre las empleadas María Silvia R. D. y su hija Daira R. D. –menor de edad– de haber brindado información para llevar a cabo el robo. En una escucha telefónica, el preso Alexis A. le dice a un delincuente: "¿Querés laburar? Hay un laburo entregado. Es un negocio que atienden la mamá y la hija. Son las dos que se entregan"

La jueza Marcela Canavesio dictó la prisión preventiva efectiva por el plazo de ley para el preso Alexis Jonatan A. y 90 días para el ladrón Kevin Jesús O. En tanto, los policías y la empleada del quiosco quedaron en libertad –su hija, al ser menor, quedó a disposición del Juzgado de Menores–.

Los policías quedaron libres porque más allá de la conversación telefónica donde se hace mención al robo del dinero, no hubo más evidencias para poder sostener esa sospecha. En ese marco, los celulares de los dos uniformados del Comando Radioeléctrico serán peritados.