Una pareja de rosarinos denunció una verdadera odisea que vivieron en la noche del sábado cuando volvían a su casa en auto, luego de comprar comida. Según relataron, un móvil policial los detuvo para un control de rutina, pero la situación se empezó a tornar cada vez más agresiva. El conductor del vehículo terminó en el Centenario con una pierna rota y su pareja sufrió varios golpes en el rostro.

La supuesta situación se dio en Avellaneda y San Luis, cuando la pareja regresaba a su domicilio y un patrullero les hizo señas para que se detuvieran. "Se nos acerca un policía para decirle a mi novio que descienda y muestre la documentación; él se baja y muestra que tenía todo en regla y ahí viene la mujer policía, me golpea el vidrio y me dice que descienda del vehículo", relató Selene a De 12 a 14 (El Tres).

Según la joven, al descender le dijo a la oficial: "Nos paran como si fuésemos choros", y eso fue el inicio de las agresiones. "Me dice «ponete contra el patrullero», a mi novio también y ahí le empiezo a pedir disculpas, a decirle que fue un comentario sin intención a lo que la policía me responde que me calle", comentó la joven.

"Yo le pedía que no nos trate así y ahí me agarra y me mete un cachetazo que me da vuelta la cara", añadió Selene que en ese momento comenzó a gritar y logra regresar a su vehículo para llamar por teléfono a su madre.

"Le cuento lo que pasó y mi mamá me pide que le saque fotos al patrullero, yo le digo que me traiga plata porque no se entendía lo que querían, pero de los nervios no sabía decirle dónde estaba", agregó.

Mientras hablaba con su madre, y siempre según su relato, se acercó al móvil policial para tomar los datos de la patente. "Ahí siento que me agarran de los pelos y me meten al patrullero, mi novio ve como me trata y empieza intentar sacarla y ahí lo agarran todos los policías, yo seguía todo el tiempo con el celular en la mano, como no me lo podía sacar me pega con las esposas en la nariz y ahí me lo saca y después se lo dan a mi novio", indicó.

Pero la situación no terminó ahí: tras quedarse sin el celular, Selene fue trasladada en el móvil al Carrasco, donde denunció que la mujer policía la encerró en el baño mientras le lavaba la cara: "Me decía «mirá lo que me hiciste hacer, para qué me contestaste». Y que ella ahora iba a tener un problema terrible". En tanto que su pareja terminó en internado en el Centenario con la pierna rota.

La pareja quedó con una causa iniciada por resistencia agravada.