En medio de la búsqueda de acuerdos y voluntades dentro del propio oficialismo y a horas del inicio del tratamiento legislativo del acuerdo del gobierno con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el presidente del bloque del Frente de Todos (FdT) en la Cámara de Diputados, el rosarino Germán Martínez, es “moderadamente optimista” para conseguir la media sanción del proyecto. “No me hago rulos antes de tiempo porque uno se puede descuidar nunca”, agregó, mientras intenta alcanzar “el mayor nivel de convergencia posible” dentro de la coalición. No quiso anticipar números ni tampoco avanzar sobre cómo tratará de convencer a los legisladores de La Cámpora que ya hicieron público su rechazo al entendimiento, incluso su compañero Máximo Kirchner. Tomó con “naturalidad” y “sin tremendismos” las diferencias internas.

Martínez, en su debut como jefe de la bancada oficialista, está frente a una prueba de fuego -pese a que él no la entiende así-: a partir de mañana lograr el mayor nivel posible de consenso dentro del propio espacio y buscar puentes con sectores de la oposición que le permitan alcanzar los votos suficientes para lograr la aprobación del mayor desafío que tiene la gestión de Alberto Fernández.

El diputado, inscripto en La Corriente que lidera Agustín Rossi, fue elegido hace un mes por el Presidente de la Nación para reemplazar al hijo de la vicepresidenta que renunció a la presidencia del bloque del FdT y participa activamente de las negociaciones de última hora. Pese al poco tiempo que estuvo en la ciudad durante este fin de semana aceptó hablar con Rosario3:

-¿Se podrá conseguir una postura unificada del FdT a la hora de votar el acuerdo con el FMI?

-Vamos a intentar el mayor nivel de convergencia posible dentro de las diferentes miradas que hay en el Frente de Todos. Hay que tener en cuenta dos elementos. Uno que se trata de una coalición donde hay matices que hace que frente a grandes discusiones como ésta se generen distintas miradas que tienden a expresarse de diferentes formas. Yo lo tomo con naturalidad, no con tremendismo. Siempre deseo que los bloques del oficialismo tengan el mayor consenso interno, pero si no se logra me parece que es lógico que haya diferencias.

El rosarino Germán Martínez, hoy un hombre clave en el peronismo nacional (Alan Monzón/Rosario3)

-¿Va a tratar de convencer a La Cámpora para que al menos se abstenga?

-No quiero hacer ningún reduccionismo sobre la actitud de ninguna agrupación dentro del Frente porque es un debate que va más allá de cualquier organización. Habrá compañeros que tendrán miradas críticas al proyecto. No estamos arrancando de cero. Tratamos de refinanciar una deuda de 44 mil 500 millones de dólares que tomó Macri y que este año nos obliga a pagar 19 mil millones y el año que viene otros 22. Estamos refinanciando con una ventana de 4 años y medio sin aplicar ninguna de las recetas tradicionales del Fondo: sin ajustes en las cuentas públicas, ni reformas previsional ni laboral, sin tarifazos. No me parece que tengamos que enamorarnos de (Kristalina) Giorgieva (hoy titular del FMI) como Macri proponía de enamorarnos de (Christien) Lagarde (ex jefa del organismo). Tampoco creo que estos sean partidos que haya que festejarlos colgados del alambrado. Tenemos un acuerdo muy razonable que le permite al país consolidar un camino de recuperación iniciado meses atrás.

-¿Cuál es la relación que tiene con Máximo?

-De respeto y confianza creada por el trabajo. Nos conocemos desde hace mucho tiempo. Fuimos de menor a mayor, a partir de encuentros y charlas. Se dio esta situación de su renuncia y mi nombramiento. Lo charle con él, hablamos mucho de política y poco del FMI. Voy a poder contar con él para seguir consolidando este rumbo.

-¿Cuál fue el pedido que le hizo el Presidente?

-Lograr el mayor consenso interno y argumentar lo mejor posible para tener mayor nivel de consenso para el próximo jueves en el recinto.

No creo que el acuerdo con el Fondo sea un partido que haya que festejarlo colgados del alambrado

-¿Negoció con la oposición bajar su pretensión para que los funcionarios de Macri vayan a dar explicaciones al Congreso sobre el préstamo?

-Volví a insistir en Labor Parlamentaria pero no tenemos mayoría y la lógica de la negociación está presente. Los otros bloques pensaron que el mejor ámbito es la Bicameral de la Deuda y al no tener consenso decidimos que la reunión ampliada de las comisiones del próximo martes sea con diferentes organizaciones empresariales. No obstante, mientras vayamos describiendo los pasos del préstamo en éstos días vamos a ir viendo el origen del problema. No se puede entender éste programa de facilidades extendidas sin analizar los dos Stand-by que Macri firmó en el 2018. Esas cosas se tienen que saber para entender cómo estamos.

Sergio Roulier entrevistó a Germán Martínez en su despacho en Rosario (Alan Monzón/Rosario3)

-¿Sacó números de cómo están para llevar el debate al recinto y llamar a votación?

-Nunca hablé de números internos, ni de mayorías dentro del bloque. Nunca señalé ni acusé a ningún diputado por su mirada con respecto a este tema. Mi obligación es pensar en el recinto del próximo jueves y también en el día después. Tengo que pensar que el bloque siga unido y que la coalición salga fortalecida independientemente de las distintas miradas.

-¿Fue una señal que un importante sector de la oposición no se haya levantado del recinto cuando habló el Presidente el pasado martes?

-Sí. Si esa señal se consolida en el tiempo se abre un nuevo capítulo en el Congreso. Soy de hablar poco acerca de los bloques opositores. Ante la actitud de los que se levantaron y se fueron valoro a los que se quedaron escuchando más allá de que tengan la misma mirada de los que se levantaron y se fueron.

-¿Está convencido de que conseguirá los votos suficientes para que se apruebe el acuerdo?

-Soy moderadamente optimista aunque no me haga los rulos antes de tiempo porque uno no se puede descuidar nunca.

-¿Es su prueba de fuego al debutar como jefe del bloque oficialista?

-No lo siento así. Siento que es una ley importante con una gran cantidad de componentes. Estoy muy contento del camino avanzado, con debates internos con la menor estridencia hacia afuera, nos queda casi una semana para ordenar y tener la media sanción.

De acercamientos y diferencias

-Tras su nombramiento al frente del bloque ahora se habla de la llegada de Roberto Sukerman como jefe de gabinete en el Ministerio de Trabajo e incluso de la posible vuelta de Agustín Rossi al gabinete, ¿es un regreso del espacio político de Rossi al gobierno nacional?

-Son situaciones distintas. Mi llegada a la presidencia del bloque tiene que ver con coordenadas hacia el interior del Congreso ya que hubo una decisión sobre cómo lograr los equilibrios internos. Roberto es un enorme dirigente que ha logrado cultivar vínculos y relaciones que ha hecho que muchos funcionarios nacionales lo busquen para que se sume a sus equipos. Lo de Agustín sabemos el rol que tuvo y tiene en la política santafesina. Quien toma las decisiones es el Presidente, nadie puede adelantarse a eso. 

Germán Martínez recibió a Rosario3 en su oficina del centro rosarino (Alan Monzón/Rosario3)

-Insisto con la pregunta, ¿hay un acercamiento?

-Nunca hubo una distancia. Olvidate de los cargos, en Santa Fe dimos una discusión política, en forma oportuna, fuimos a una primaria, perdimos, acompañamos y llegamos hasta donde se llegó. Yo lo llamé al gobernador cuando me nombraron y le dije de la necesidad del Presidente para que asuma esa responsabilidad y de que quiero dejarle en claro que una es la responsabilidad como presidente del bloque oficialista y otra muy distinta son los posicionamientos dentro del territorio.

-¿Y cuál fue la respuesta que tuvo del gobernador Perotti?

-Muy generosa y valoro mucho eso. 

El peronismo está en condiciones de ganar Rosario

-¿Quedaron heridas después de la interna del año pasado?

-Los procesos internos generan la necesidad de expresar en voz alta posicionamientos y luego es necesario regenerar puentes. Hay que limar asperezas. Y reforzar la gestión en todos los ámbitos para tener la mejor performance en el 2023. Tenemos un compromiso colectivo, las diferencias existen y van a existir, hay que procesarlas para enfrentar al futuro.

-Habla de reforzar la gestión, ¿y de unidad también?

-Y te agrego una tercera: tener liderazgos fuertes dentro de la coalición para dar los debates en 2023. A nivel nacional es el mismo camino del 2008/2009 cuando dudaban o daban por muerto al kirchnerismo. Hay que fortalecer la gestión y al Presidente para que nos hagas competitivos como proyecto.

-A nivel provincial también…

-Es lo mismo. Y con un elemento no menor: no hay reelección del gobernador. Entonces eso nos obliga a ser más colectivos.

Alan Monzón/Rosario3

-¿El gobernador pone al candidato a gobernador?

-Será difícil que haya mecanismos de imposición a lo largo y ancho del país. Se necesitan debates colectivos, con mayores o menores niveles de consenso. Supimos utilizar mecanismos de primaria de manera virtuosa pero tampoco hay que descartar a compañeros que puedan generar altos niveles de adhesión.

-¿El 2023 es la oportunidad para el peronismo de recuperar Rosario?

-En el 2019 quedamos muy cerca después de 10 años de trabajo. Después el peronismo se dio la tarea de la unidad en la diversidad con Agustín Rossi, Marcelo Lewandowski, María Eugenia Bielsa, Roberto Sukerman, Eduardo Toniolli y Alejandra Rodenas, entre otros. Es un ámbito de referencia donde se puede convivir a pesar de las diferencias. El peronismo está en condiciones de ganar Rosario y requiere de los mejores hombres y mujeres quienes puedan lograr conseguir el objetivo. También hay que ver cómo juega el adversario, la política no se hace sólo con las intenciones de uno sino también con el contexto que se genera en relación a las otras fuerzas.