Actualmente la industria del videojuego es una de las más grandes que existe. Es por eso que muchas tendencias han aparecido a lo largo de los años, estas tendencias se han constituido en torno a un modelo de negocio bastante atractivo para muchos usuarios.

Los expertos en este campo apuntan en tres direcciones: la proliferación de videojuegos en realidad virtual y aumentada, la progresiva importancia de los juegos online y la importancia creciente de los eSports.

 

Las tecnologías consideradas inmersivas (realidad aumentada, realidad virtual y realidad mixta) son las eternas candidatas a encabezar una nueva revolución digital. Los mundos que abren para interactuar de forma virtual con objetos, personas y lugares a los que no tenemos acceso físico son una fuente de aplicaciones para el campo científico, el empresarial, la medicina y, prácticamente, cualquier tipo de actividad que se nos pueda ocurrir.

Otra de las grandes tendencias, definida a veces como disruptiva, dentro de la industria del videojuego es el juego en la nube u cloud gaming. Consiste básicamente en crear una oferta de títulos a los que el usuario puede acceder a través de internet, del mismo modo que empresas como Netflix suministran series y otras como Spotify música.

El último gran fenómeno que ha surgido en torno a este sector de ocio son los denominados eSports, basado en videojuegos multijugador de éxito, cuyos torneos se convierten en espectáculos en vivo para multitudes en estadios y hasta son retransmitidos por televisión.