Para aquellas personas que desean trabajar sin jefe, no tener horarios fijos o quieren estar más presentes en la crianza de sus hijos, el trabajo freelance es una opción que crece día a día, transformando el mercado laboral. 

Si sos una de esas personas, sabés que uno de los momentos más complejos es el de presupuestar un proyecto, que te permita atraer clientes y lograr un ingreso razonable. A continuación, te brindamos algunas recomendaciones, publicadas por el sitio lanacion.com.ar, que te ayudarán a poner un valor a tus servicios.

Horas laborables. Podés elegir cuantas horas dedicarle a tu trabajo, siempre y cuando cumplas con lo pautado. Pero tené en cuenta que ese tiempo, habitualmente, suele ser mayor del programado. Por esta razón, es recomendable que calcules las horas laborables, aunque sea de forma aproximada.

Herramientas de trabajo. Los papeles, impresiones, mantenimiento de los dispositivos móviles y muchos otros gastos, son costos que debés agregar a tu presupuesto. Lo mismo sucede con las herramientas gratuitas y las versiones de prueba, porque al cabo de un tiempo, vas a necesitar las licencias pagas, que te ofrecen mejores resultados y a veces son indispensables para realizar el trabajo.

Gastos fijos. Recordá que los servicios como la luz e internet y algunos viáticos, incluso esos cafés con los clientes, también deben imputarse en los costos laborales.

Vacaciones. Como todo trabajador, te corresponden días de descanso. De igual manera, las horas no trabajadas, deben ser tenidas en cuenta para el presupuesto final así como los días feriados.

Cobertura médica. Los días por enfermedad son algo muy habitual pero poco considerado. Es importante tener en cuenta, si precisás hacer reposo, los días que no trabajarás como el gasto en medicamentos.

Calculadora de gastos. Si necesitás una ayuda extra, podés utilizar la calculadora Freela, desarrollada por Workana, que te permite tener un panorama más claro sobre el monto ideal que deberías cobrar.

No tengas vergüenza en pedir tu remuneración. Tenés que aprender a cobrar lo que vale tu trabajo.