Grandes monstruos tecnológicos como Google, Microsoft o HP hace tiempo que tienen puesta la mira en el gran negocio que es la educación y ofrecen multitud de herramientas y formación enfocadas a ese objetivo.
Más allá de la incorporación de internet a los colegios o el uso de tabletas, portátiles o pizarras digitales en las aulas, ahora es el turno del aterrizaje de las herramientas que conectan los distintos elementos entre sí y los ponen al servicio de los alumnos, los profesores y el entorno familiar como refuerzo del aprendizaje.
Ahora los lápices y los sacapuntas conviven en los pupitres con dispositivos conectados y aplicaciones para la gestión de la educación. Pero no solo hablamos de conectividad en el aula, ya que la inteligencia artificial y la programación ocupan cada vez más espacio en el día a día de los colegios. Se abren nuevas propuestas pedagógicas y tecnológicas
Una tendencia clara en la actualidad es acercar la robótica a las edades infantiles iniciando en conceptos de programación desde muy temprano.
De este modo, nacen los nuevos Kits Tecnológicos de Robótica Educativa, que invitan a los alumnos a vivir una experiencia transversal en todas las materias.
Kits Tecnológicos y sus ventajas
El aprendizaje de la robótica sustentado en la programación puede llegar a ser una poderosa herramienta para que los chicos logren:
-Dominar las interacciones entre el mundo físico y el virtual
-Aprender haciendo.
-Estructurar el pensamiento lógico, crítico y computacional.
-Habilidades creativas, de programación y constructivas, habilidades y competencias para el siglo veintiuno.
-Sociabilizar los logros.
-Resolución de problemas o desafíos.
-Aprendizaje significativo.
-Trabajo en equipo y colaborativo que evita que los estudiantes interactúen solitariamente frente a una PC, smartphone o tablet.
-Familiarización en forma lúdica con las nuevas tecnologías de la información y de la comunicación (NTICs).
-Generar una comunidad activa y creadora con el resto de los alumnos.
-Autocorrección de errores que favorecen la autonomía del estudiante en el proceso de aprendizaje.
En definitiva, la robótica y la programación pretenden formar a niños y niñas que sean capaces de enfrentarse al mundo que nos espera, pero no solo eso, deberán también ser los artífices del cambio, de convertir nuestro mundo en un lugar mejor a nivel social y medioambiental.