Rosario Central ya tiene seis refuerzos. El último fue el arquero Sebastián Sosa, quien acordó llegar a préstamo por los próximos doce meses. Y este fin de semana que se inicia será de “final feliz” para la novela Donatti. Pero el Canalla aún no le diría adiós al mercado.

Es que en las últimas horas aparecieron dos nuevos nombres con ciertas chances de aterrizar como incorporaciones para el plantel que jugará el torneo local y la Copa Libertadores: Daimán Álvarez y Pablo Mouche.

El primero juega en Tigres de Monterrey y lo conoce a Coudet desde su época de River, donde coincidieron como jugadores. El otro es atacante ex Boca y actúa en Palmeiras de Brasil, aunque viene de una lesión y no trae continuidad.

De todas maneras, el Chacho ya está conforme con la legión de seis nuevas caras que arribaron a la entidad. Y evalúa que un nuevo refuerzo no vendría mal, pero sería un bonus track. Por lo pronto, espera sin desesperar.