“​Nos dijeron que si no lo mandábamos, iban a mandar a la Federal". La frase de Juan Carlos Pallarols, el orfebre que se especializa en la confección del bastón presidencial desde 1983, resume el increíble conflicto desatado para coordinar la transición entre el gobierno saliente y el entrante.

El artesano contó que una de sus empleadas recibió una amenaza de personal de Ceremonial de la Presidencia para la que la entrega del emblema se realizara de inmediato. Caso contrario, advirtió el interlocutor, lo irían a buscar con la Policía Federal.

"Escuché que mi empleada levantó el tono de voz y empezó a decir 'no me amenace', me acerqué y vi que estaba hablando por teléfono y cuando cuelga me cuenta que llamó un señor Jorge de Ceremonial diciendo que si no llevamos el bastón lo viene a buscar la policía", relató a La Nación.

Pallarols reconoció que, tras el episodio, lo contactó el Director de Ceremonial, Nelson Periotti aclarando que se trataba de un malentendido y le pidieron disculpas.

“Me llamó e director de Ceremonial diciendo que fue un malentendido, que quien llamó no había querido decir eso y acepté las disculpas", añadió.

El episodio sucede luego de las discusiones sobre dónde se realizará la entrega de la banda y el bastón presidencial, entre las intenciones por parte del gobierno saliente para que sea en la sede del Congreso y lo que pretende el gobierno entrante, que prefiere la Casa Rosada.

"Yo quiero que se pongan de acuerdo los dos directores de ceremonial. No puedo permitir que el bastón se transforme en un botín de guerra", reclamó el maestro orfebre.

Además, dijo a Radio Ciudad: “No hay una ley que indique cómo es la entrega del bastón. Estoy esperando a ver qué ocurre. Han pasado 32 años y seguimos teniendo lo mismo que pasaba antes”.

Pallarols, quien contó su trabajo y experiencia a Rosario3.com, se encargó de crear todos los bastones presidenciales desde la asunción de Raúl Alfonsín en 1983 hasta la actualidad.