Fracasó la sesión especial en la Cámara de Diputados que había solicitado la oposición para debatir este miércoles un freno a los constantes aumentos de tarifas de los servicios públicos.

El levantamiento del debate estuvo cargado de polémica con una particular actitud del salteño Alfredo Olmedo, quien dijo estar de acuerdo con el proyecto pero pidió suspender la reunión porque ya se había cumplido el tiempo reglamentario. Esta situación derivó en que no se logre reunir el quórum necesario de 129 diputados, quedando a un solo un legislador de poder comenzar el debate.

"Vino un diputado del oficialismo y prácticamente lo levantó a Olmedo de su banca. Acá hubo una maniobra absolutamente oscura. Esto es peor que el diputrucho", dijo la diputada massista Graciela Camaño. 

"Yo no tengo negociaciones con nadie", se defendió Olmedo en declaraciones al canal C5N y negó que se haya levantado de su banca por pedido de un diputado del oficialismo. "Cuando yo sea presidente de la Nación los horarios se van a respetar", remató justificando su accionar.