Las 27 plantas que elaboran biodiesel para corte obligatorio con gasoil pararon su producción a raíz del impacto de la devaluación en sus costos.

Ante esta situación, las principales cámaras empresarias que reúnen a las pymes del sector -Casfer, Cepreb y Capba- le enviaron una carta a la Secretaría de Energía de la Nación solicitando una corrección urgente del último precio de venta del biodiesel, atento la variación del tipo de cambio producida.

El Estado es el que fija el precio al que se vende el bio en el mercado interno (a petroleras), mientras que el bio que se exporta tiene precios libres.

“Sin la urgente actualización del último precio publicado, no resulta económicamente factible la operación, toda vez que los dólares resultantes de convertir el precio de venta en pesos actual no alcanzan siquiera para cubrir los costos variables de producción", señalan.

"Como consecuencia se pone en riesgo la continuidad de nuestras empresas y de los miles de empleos directos e indirectos relacionados con la actividad, la salud pública por el empeoramiento de la calidad del aire y el alejamiento del país de sus metas de ahorro de gases de efecto invernadero comprometidas bajo el Acuerdo de París - que tiene un rango superior al de las leyes al ser un acuerdo internacional suscripto por el Congreso-; resultando oportuno también incluir que sin previsibilidad se torna imposible invertir en desarrollo de mejores y más eficientes tecnologías de producción de biodiesel”, resaltan las cámaras.

También agregaron: “El desabastecimiento producto de la falta de acción concreta sobre el problema de precio insuficiente enunciado generará que, indefectiblemente, se vuelvan a repetir las situaciones de escasez de gasoil que se vivieron en los meses recientes y/o la necesidad de reemplazar la producción nacional de biodiesel con mayor importación de gasoil (recordando las consecuencias socioeconómicas, ambientales y de salud pública), todo en un contexto delicado de restringida disponibilidad de divisas”.