Luego de varias quejas en torno al funcionamiento de las comisarías, el jefe de la Unidad Regional II, Marcelo Villanúa defendió la labor policial y señaló que ya se intervino en los hechos denunciados. En una semana se contó la fuga en la subseccional 21ª, en la cual luego fotografiaron a un policía dormido; y dos casos de víctimas de robo a quienes por distintos motivos no les tomaron o tardaron en tomarle la denuncia: un grupo de amigos que encontró la comisaría 7ª cerrada y una muchacha que tuvo que ir tres veces a la 9ª para que la atendieran.

“Son hechos que nos preocupan”, reconoció Villanúa en contacto con los periodistas Evelin Machain y Pablo Montenegro del programa Radiópolis, de Radio 2. El jefe policial sostuvo que en cada caso “se tomaron medidas disciplinarias”.

Sin embargo, aclaró, respecto del video que captó Julián Pinto, periodista colaborador de Radio 2, que el portón que se ve cerrado estaba clausurado por trabajos de refacción hace tiempo y que el ingreso es por la puerta principal de al lado.

Con todo, reconoció que si el grupo de amigos estuvo al menos 15 minutos a los gritos y bocinazos –como refirió Pinto– para llamar la atención de los agentes, “no hay excusa” para que los policías no los atendieran.

“La comisaría no debe estar cerrada en ningún momento del día”, enfatizó.