El contador de Cañada de Gómez Abel Macchi, investigado por múltiples estafas financieras vinculadas al millonario default de sus empresas ocurrido en julio pasado, sumó una nueva denuncia penal, esta vez por administración fraudulenta y con la particularidad de que afectó a un amigo y socio al que le habría enajenado 340 millones de pesos.

Según la denuncia que patrocina el abogado Agustín Genera, la víctima es un amigo de hace 20 años, que incluso fue socio en emprendimientos agropecuarios de Macchi, quien lo contrató como contador y asesor para locales de verdulerías boutique que fue abriendo en la localidad de Funes.

En los wathsapp que mostró el letrado, la confianza del empresario en el contador era total por ser amigos de hace mucho tiempo y, no en vano, la mayoría de las conversaciones versaban sobre temas personales y familiares. Y cuando se trataban de cuestiones de la empresa, la fe en las recomendaciones era total.  Incluso, se leen conversaciones en las que le prestaba plata al contador.

Las irregularidades denunciadas ocurrieron entre marzo y junio de este año, cuando el contador defaulteó. ¿Cómo fue la operatoria? Macchi le dijo al empresario que para terminar de ordenar su situación con ARCA debían hacer un entrecruzamiento de cheques entre ellos por el mismo monto que el mismo iba a ir confeccionado para calzar los pagos y  vencimientos. 

Para eso, se lee en los whatsapp, le pedió que el administrador de los locales le pase los tokens el día en que se los requiera. Fue asi que el contador  confeccionò los cheques electrónicos de pago diferido emitidos por la verdulería a su nombre en tres tandas que redondearon los 340 millones de pesos. En paralelo, Macchi emitió igual cantidad en cheques al empresario.

Según el seguimiento de los cheques, y por lo que también confesó Macchi, el contador endosó al toque los cheques y los cambió (a bancos, proveedores y mutuales) haciéndose rápidamente del dinero, pero llegados los vencimientos de los cheques propios, no los pago por lo que la verdulería se quedó sin fondos para pagar los suyos.

Para evitar girar en descubierto y que lo sancionen, el empresario verdulero cubrió los primeros (unos $100M), pero como el monto es tan grande y se le viene un descalce por $200M, denunció al contador y pidió a la Justicia que esos cheques no se cobren.

No obstante, en la audiencia imputativa celebrada el viernes  -en la que Macchi estuvo presente y rodeado de media docena de policías porque la situación con los acreedores que va sumando es cada vez más tensa- la Justicia rechazó el pedido de que esos cheques no sean ejecutados porque los tenedores los habrían recibido de buena fe, dejando al empresario afectado con la millonaria cuenta a pagar. El rojo complica seriamente al negocio del empresario.

“No es una estafa como las que ya se le denunciaron porque acá no hay un engaño para lograr una disposición patrimonial, por ejemplo aparentando solvencia, sino que lo que ocurre es que quien tenía la gestión de un patrimonio comete actos contrarios a los intereses del titular y en beneficio propio. Hubo un claro abuso de confianza”, dijo el abogado Genera a Rosario3.

Con esta denuncia sigue escalando el default del contador, que sacude toda la zona de Cañada, que ya llega a 12 mil millones de pesos en cheques rebotados de sus 6 empresas, y se especula que el monto será mayor por la gran cantidad de valores emitidos por Macchi que tienen vencimiento en septiembre y octubre.