El financista Pablo Arcamone, y su ladero Martín Fernández, seguirán en prisión preventiva, pero solo hasta el 16 de diciembre ya que el empresario se comprometió a presentar en breve una propuesta de pago para las víctimas de las estafas que le imputan y por las que está detenido desde agosto.
Así lo acordaron este martes al mediodía el fiscal Sebastián Narvaja junto con los abogados querellantes y la defensa del empresario en una audiencia realizada en el Centro de Justicia Penal que fue presidida por el juez Fernando Sosa.
Arcamone quedó en prisión preventiva tras ser imputado por 13 estafas por 1.3 millones de dólares y el jueves se vencía el plazo de tres meses tras las rejas. En la audiencia de este martes, a la que fiscales y querellantes llegaron con el pedido de que se le extienda la prisión preventiva, las partes acordaron la prórroga hasta el 16 de diciembre porque la defensa informó que están evaluando presentar una alternativa de solución a las víctimas.
En ese día, se discutirá la situación de Arcamone (domiciliaria, libertad o extensión de preventiva no domiciliaria) de la que mucho dependerá de la propuesta de pago que presente el financista titular del llamado Grupo América.
Mientras tanto las partes siguen firmas en sus posturas: la defensa niega la existencia cualquier maniobra de fraude sosteniendo que el Grupo América lo que atravesó es una fuerte crisis financiera por las complicaciones económicas y que estaba intentando solucionar vía concurso de acreedores, y, por el contrario, fiscales y querellantes sostienen que se realizaron maniobras estafatorias para captar dinero del público para girarlo a negocios financieros ilícitos.