El delantero Julián Álvarez erró un penal en su regreso con el Atlético de Madrid y se marchó enojado tras ser reemplazado por Diego Simeone en el empate 1-1 frente al Mallorca, este domingo en la quinta fecha de La Liga en España.
El cordobés, frustrado, murmuró un “siempre a mí” al llegar al banco de suplentes, gesto que expuso públicamente su malestar con el entrenador argentino.
El ex River y Manchester City tuvo la chance más clara en la primera parte mediante un penal, pero el arquero Leo Román se lo atajó.
A los 62 minutos, Simeone decidió sustituirlo por Alexander Sorloth, decisión que derivó en un visible gesto de disconformidad de Álvarez. El ingreso del noruego tampoco resultó: fue expulsado a los 72.
Julián volvió a jugar tras superar una lesión que lo había marginado de los últimos partidos, pero su aporte ofensivo volvió a ser insuficiente para un Atlético que acumula frustraciones en el inicio del campeonato.
En cinco fechas de Liga, la Araña solo completó un encuentro entero y suma apenas un gol y una asistencia.
El empate ante Mallorca prolongó la irregularidad del equipo del Cholo, que otra vez dejó escapar la victoria en los tramos finales.
Se puso en ventaja con un grito de Conor Gallagher, a los 79 minutos, pero el Mallorca empató a través de Vedat Muriqui, a los 85.
Con el 1-1, el Atlético quedó con apenas seis puntos sobre quince posibles y a nueve del Real Madrid, líder del campeonato.
En conferencia, Simeone justificó el cambio: “Julián es el mejor que tenemos ofensivamente, pero necesitamos tenerlo en las mejores condiciones. Entendía que el ingreso de Sorloth podía darnos algo diferente”.
Sobre el fastidio del cordobés, el técnico restó dramatismo: “Todos se enojan cuando salen”.
Goleada del Barcelona
El Barcelona se impuso con autoridad en su visita al Getafe y obtuvo un triunfo por 3-0 que le permite seguir de cerca (a dos puntos) al Real Madrid en la cima de La Liga.
Los goles del equipo catalán fueron obra de Ferrán Torres (doblete) y Dani Olmo.