1-Hugo Orlando Gatti: “¡Un grande! El Loco fue un gran compañero y un ejemplo para mí. Cuando llegué a Boca con 21 años, él me enseñó a ser un futbolista profesional. En las concentraciones era un placer y disfrutaba muchísimo quedarme a charlar con Gatti en las sobremesas de los almuerzos y las cenas. Hoy está muy picante con sus declaraciones, nada que ver a cuando éramos compañeros, era más tranquilo y divertido”.
2-Edgardo Bauza: “Admiración total por el Patón. Fuimos compañeros en Central, compartimos muchas cosas, siempre me demostró ser un gran profesional y una gran persona. Y como DT con todo lo que logró, nadie puede discutir su enorme capacidad para dirigir. Un pena muy grande lo que está viviendo con sus problemas de salud, ojalá se pueda recuperar muy pronto”.
3-Cesar Luis Menotti: “¡Un maestro! Todo lo que hice en el futbol fue gracias a los consejos de Cesar… me sirvieron para toda mi carrera. Nunca había tenido un verdadero maestro del futbol hasta que el Flaco me dirigió en la selección juvenil. Me enseñó cómo debía moverme de tres cuartos de cancha en adelante. Aprendí todo lo que tiene que saber un delantero”.
4-Hernán Díaz: “Sacrificio y despliegue. Hernán podía jugar de cuatro o de ocho, el ida y vuelta que tenía era increíble, y además llegaba al gol. La Hormiga fue uno de los juveniles de Rosario Central elegido por Don Ángel para integrar y participar de aquel plantel campeón en el año 1987. Fue muy importante su aporte y ayudó muchísimo para conseguir el título. Tengo el mejor de los recuerdos de Hernán Díaz”.
5-Claudio Marangoni: “Un futbolista impresionante… muy elegante. Marangoni fue un cinco clásico que manejaba el balón con una inteligencia superior. Yo jugaba en las inferiores de Chacarita y a Claudio lo iba a ver jugar en la primera del Funebrero. Hasta que en el año 1985 en Independiente, tuve la gran fortuna y el enorme privilegio de ser su compañero por un año”.
6-Oscar Ruggeri: “Un líder que ganó todo. Con el Cabezón fuimos compañeros en el inolvidable Boca de Maradona campeón del 81. Ruggeri con 19 años tenía una personalidad inusual para un joven de esa edad. Fue una pieza fundamental para lograr el título, inclusive porque convirtió goles muy valiosos. Sigo en contacto con él, mantenemos una linda relación de amistad hasta el día de hoy”.
7-Marcelo Trobbiani: “¡Un genio! Marcelo fue un futbolista muy inteligente, con mucha personalidad que pedía siempre la pelota. Tenía una particularidad que tienen muy pocos jugadores, pisaba mucho la pelota. Técnicamente era maravilloso verlo jugar”.
8-Miguel Brindisi: “Miguel jugaba en todos los puestos de la mitad de la cancha y de ataque, muy bien. En Boca del 81 cuando Diego en los primeros partidos no jugó, Brindisi se puso el equipo al hombro, la rompió e hizo un montón de goles. Fue una de las grandes figuras de aquel Boca que quedó en la historia del futbol argentino”.
9-Ramón Díaz: “Muy goleador y muy rápido para marcar el pase y definir. Ramón fue uno de los grandes delanteros que tuve como compañero. Siempre que pude lo asistí para que él finalice la jugada en gol. En todo el proceso de la selección juvenil que se consagró campeón en Japón en el año 1979, con Ramón nos tocó compartir la habitación en todas las concentraciones y nos hicimos muy amigos. Realizó una carrera fantástica y triunfó en el siempre difícil futbol de Italia”.
10-Ricardo Bochini: “¡Un futbolista que sale cada cien años! El Bocha era un jugador que nunca sabias para dónde iba a salir, mucho talento, mucha habilidad y muy inteligente. Te dejaba mano a mano con el arquero con una asistencia que solo él, primero detectaba y luego efectuaba. Bochini entrenaba poco pero evidentemente le alcanzaba para descollar en todos los partidos. El Bocha adentro de una cancha generaba un espectáculo increíble para el hincha del Independiente y para los hinchas del buen futbol”.
11-Omar Palma: “¡Un jugador extraordinario! Omar fue de los mejores futbolistas de la historia de Rosario Central. Fue la gran figura y el gran capitán de Central campeón del 87. Palma era muy guapo, encaraba siempre para adelante, no lo podían agarrar y le pegaba a la pelota como los dioses”.