Producto del esfuerzo y el sacrificio, dadas las condiciones adversas en las que se desarrollan los tenistas sudamericanos, Peque cada año se supera a sí mismo y confía en el proceso.

Preparado físicamente por Martiniano Orazi y entrenado por Juan Ignacio Chela y Leonardo Olguín, consiguió varias metas resonantes en los últimos veinte días: llegó a su primera definición de Masters 1000, alcanzó sus primeras semifinales en un Grand Slam, garantizó su acceso al selecto grupo de los diez mejores del ranking y cosechó sus dos primeros éxitos ante jugadores del top 5 -Nadal y Thiem-.