La Associazione Unione Italo Discendenti nel Mondo (UID), en colaboración con Casa Calabria, la Universidad de Calabria (Unical) y el municipio calabrés de Maida, lanzaron un proyecto que aspira a favorecer el regreso a Italia de los ítalo-descendientes, considerados como una fuerza con gran potencial de repoblamiento.
Para esto se dispusieron una serie de medidas que van desde el apoyo a la reconstrucción de la ciudadanía hasta la búsqueda de trabajo, alojamiento y revalidación de títulos universitarios. El proyecto se organiza en conjunto con el municipio de Maida, en la provincia de Catanzaro (Calabria), donde viven unos 4.600 habitantes.
"Italia necesita a sus ítalo-descendientes y a los italianos en el mundo porque es un país envejecido, y tras la pandemia todo cambió completamente", le dijo a Ansa la presidente de la UID, Andrea Pacia.
"Es preciso crear las condiciones para el regreso: tenemos 21 millones de ítalo-descendientes en la Argentina, 42 millones en Brasil, podemos prácticamente rejuvenecer a Italia cuando queremos", agregó.
Pacia señaló que el proyecto, con el cual apuntan fundamentalmente a la población "de las áreas en crisis de América Central y del Sur, o más en general con un desarrollo inferior" al de Italia, contempla los "principales límites y obstáculos a su integración", tales como el escaso conocimiento de la lengua y la cultura italiana.
"Italia es el único país del mundo donde no hay límites para el reconocimiento de la ciudadanía, pero este reconocimiento aumentó de modo considerable a lo largo del tiempo con el solo fin de mudarse a países europeos de lengua española o portuguesa, e incluso a Norteamérica y otros países de Europa", señaló la presidente de la UID.
Si bien entre 1998 y 2006 se concedieron 600.000 actas de ciudadanía italiana por descendencia (40% de ellas para argentinos), muchos ítalo-argentinos terminan migrando hacia españa. Por esto, el objetivo es crear las condiciones para que los ítalo-descendientes regresen y permanezcan en Italia, para lo cual la UID habló con empresarios, municipios y diferentes asociaciones.
Pacia apuntó que "los empresarios se pusieron a disposición" y que "ahora es posible que la persona que tramita el reconocimiento de ciudadanía obtenga durante la espera un permiso de trabajo".
En tanto, afirmó que "el reconocimiento es un derecho desde el nacimiento" y añadió: "Hasta que no cambie la ley, son italianos los hijos de ciudadanos italianos. Esa ley no la cambiaron siquiera los padres fundadores de la República; quiere decir que debe permanecer así".
El proyecto comenzará en septiembre y serán seleccionados alrededor de 15 postulantes que escriban a la UID, quienes tendrán que garantizar una permanencia de seis meses en el municipio de Maida y podrán contar con cursos de italiano. Además, la Unical evaluará la conversión de los títulos de estudio extranjeros en títulos italianos.
Pacia dijo que a quien quiera participar del proyecto "se le ofrecerá trabajo en el sector agrícola (cosecha de olivas y de uvas, entre otros) o en las distintas áreas del turismo".
"Empezamos con Maida, pero quisiéramos replicar este proyecto en todas las regiones: no solo Calabria se despuebla, sino también regiones como Friuli-Venezia Giulia, porque la gente no quiere vivir en la montaña, faltan alojamiento e infraestructuras", agregó.
Finalmente, Italia favorece el retorno de italianos en el exterior mediante facilidades y exenciones impositivas, tanto para quienes busquen desarrollar una actividad laboral como para quienes estén jubilados.